La noche del 15 de enero, Marco Zuleta (inicialmente identificado como Juan Zuleta) realizó un acto heroico que logró evitar un casi seguro feminicidio. Mientras recorría la cuadra cuatro de la avenida Las Américas limpiando autos, observó a lo lejos como Brigitte Flores, de 26 años, discutía con su pareja. A medida que se acercaba a la escena, las frases altisonantes se transformaban en jalones de cabello y otras agresiones hacia la mujer.
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La violencia alcanzó su punto más alto cuando el agresor, identificado como Julio César Rojas Mogollón, sacó una galonera y roció combustible sobre la víctima. Cuando se disponía a prenderle fuego, el joven se colocó en medio de ambos, logrando ponerla a salvo de las llamas.
A poco más de una semana del hecho, la salud de Marco sufrió una recaída y fue derivado al área de emergencia del hospital Hemilio Valdizán, ubicado en el distrito de Santa Anita. La noticia fue confirmada a este Diario por Erwin Apaza, jefe del Servicio de Emergencia del hospital. El médico señaló que el joven ingresó al establecimiento de salud después de las 7 de la noche para una evaluación psiquiátrica. Sin embargo, esa misma noche abandonó el lugar.
“Por el momento no tiene una complicación médica y manejo ambulatorio. El personal del Inabif se iba a encargar de dónde él iba a pasar la noche. El paciente salió del hospital a las 7:45 p.m. Estará al cuidado del Inabif”, señaló.
Apaza recomendó al joven recibir tratamiento y tener un lugar de acogida para tratar los problemas adquiridos de una vida en la calle. A mitad de semana, la ministra de la mujer, Gloria Montenegro, garantizó que Zuleta recibirá atención por parte del equipo técnico del Centro de Atención de Emergencias y Urgencias del Inabif.