En el corazón del Aeropuerto Internacional Jorge Chávez, un problema amenaza la seguridad y la tranquilidad de los pasajeros: las asociaciones de taxis no autorizados que despliegan todo tipo de estrategias para competir contra las empresas de taxis oficiales, generando caos e inseguridad en las inmediaciones del terminal aéreo. Se trata de las asociaciones que, como reveló El Comercio, tienen a unos 200 choferes con antecedentes policiales y procesos en la fiscalía por delitos que van desde el robo y el secuestro hasta el homicidio.