Una nueva película protagonizada por Bradley Cooper, Emma Stone y Rachel McAdams que se graba en Hawái está siendo criticada por los nativos hawaianos.
El motivo es el título de la película, "Aloha", el cual "constituye una apropiación irrespetuosa de la cultura que simplifica una palabra rica en significado".
Las críticas, que tienen como protagonista principal al comisionado de cine de Hawái, también van dirigidas hacia el hecho de que la película no refleja la diversidad étnica de los residentes de la isla.
En el comunicado publicado por el "New York Post", la Cadena de Acción por los Asiático-Americanos (MANAA por sus siglas en inglés) culpó directamente al director del filme, Cameron Crowe, por escoger para la película solamente actores de tez blanca.
"Los caucásicos son solo el 30 por ciento de la población de Hawái, pero al ver la película uno puede pensar que son el 99 por ciento", se indica en el comunicado.