Guillermo Vera Ayala
La noche de este viernes el experimentado músico estadounidense Chris Cornell se presentó en la Huaca Pucllana de Miraflores para brindar un concierto acústico de marcada vena rockera.
Cornell llegaba a la ciudad dos años después de su primer recital en el país junto a Soundgarden, banda con la que contribuyó de forma decisiva a definir el sonido de la primera parte de los años 90. En esta ocasión el artista llegaba a presentar sus trabajos en solitario, aunque sin olvidar su paso por la citada agrupación y otros proyectos como "Audioslave" y "Temple of the Dog".
Poco antes de las 8.30 p.m., acompañado únicamente de su guitarra, el artista abrió la noche musical con “Before We Dissapear”.
Lejos del histrionismo y sonoridad de su paso por Lima con Soundgarden, Chris Cornell ofreció un recital de corte íntimo, aunque ello para nada haya implicado la ausencia de la intensidad que caracteriza a sus presentaciones.
Temas como “Til’ the Sun Comes Back Around”, “Nearly Forgot My Broken Heart” y “Let Your Eyes Wander” mostraron a un Cornell más sensible, que también parecía sentirse cómodo asumiendo tal rol. El artista incluso se animó a comentar de forma escueta el presente político de su país, aunque prefirió no profundizar en ello.
La noche de la Huaca Pucllana también tendría lugar para los homenajes, pues tras mostrar su veneración por The Beatles y Bob Dylan, según dijo, figuras fundadoras y tutelares del movimiento del que forma parte, Cornell interpretó uno de los temas más representativos del último de estos: “The Times They Are A-Changin’”. Previamente al cantante había tocado “Nothing Compares 2 U” de Prince.
Los momentos de una respuesta más intensa por parte del público fueron los que abordaron el paso de Cornell por Soundgarden y Audioslave gracias a temas como “Fell on Black Days”, “Be Yourself”, “Rusty Cage”, “Doesn’t Remind Me” y la clásica “Black Hole Sun”. Tambrién habría cabida para el catálogo de Temple of the Dog con temas como “Wooden Jesus” y “Hunger Strike”.
Ya cerca del final, el músico dio muestras de que no había mencionado a The Beatles en vano, con una emotiva interpretación de “A Day in The Life”, la cual se vio enriquecida notoriamente gracias a la inclusión del chelo.
Luego de esto, el ídolo de la generación ‘grunge’ dejaría el escenario, solo para volver y cerrar el concierto con un ‘encore’ compuesto por “Sunshower” y “Higher Truth”, tema que da nombre a su último trabajo en solitario.
Cornell se marcharía agradeciendo al público. “Han estado fantásticos”, mencionó antes de irse dejando a los asistentes, los jóvenes de antaño y también aquellos que descubrieron su música después, bastante satisfechos.