Cada comienzo de año llega con la ilusión de comer más saludable, pero es fácil caer en las trampas de la industria alimentaria. Muchas veces, productos que se promocionan como saludables no son tan buenos para nosotros como aparentan ser, por lo que es necesario estar informado para evitar consumir alimentos poco saludables que comprometan nuestra salud.
El Dr. Mitchell Roslin, experto en cirugía bariátrica del Hospital Northern Westchester de Nueva York, advierte sobre un alimento que, usualmente, es promocionado como una alternativa más saludable: las frituras de vegetales, también conocidos como chips vegetales.
“La gente piensa que la coliflor es saludable, pero hacer chips de coliflor no la hace más nutritiva”, afirmó Roslin en conversación con el New York Post. “Pero si se hacen chips de coliflor [o] corteza de pizza de coliflor, eso es principalmente almidón de maíz y es menos beneficioso”.
Según Roslin, las frituras de papas están llenas de calorías, son altas en sodio y, además, no satisfacen el hambre. En todo caso, el médico sugiere el consumo de verduras frescas con hummus para untar.
“Una patata crece en la tierra”, explica el cirujano. “Es sana, siempre que el interior sea mayoritariamente almidón. Lo que la hace menos sana es lo que le haces, como convertirla en patata frita”.
La dietista Abbey Sharp coincide con Roslin y señala que las patatas, a menudo excluidas en dietas, son una buena fuente de nutrientes cuando se preparan de manera sencilla.
“Las patatas no te hacen ganar peso intrínsecamente”, asegura Sharp.
El problema, sin embargo, surge cuando este tubérculo se fríe o se cubre con salsas, ya que pierde sus propiedades beneficiosas. Lo mismo ocurre con las patatas fritas vegetales, que a menudo son procesadas y contienen altas cantidades de sodio y grasas.
Por su parte, la dietista Caroline Thomason realizó un estudio comparativo de diferentes marcas de patatas fritas vegetales y descubrió que, aunque algunas ofrecen algunos nutrientes adicionales, no son necesariamente más saludables que las patatas fritas tradicionales.
En lugar de buscar alternativas procesadas, es mejor enfocarse en alimentos enteros y mínimamente procesados. Las verduras frescas y los granos integrales siempre serán opciones mucho más saludables.