Redacción EC

Era el año 2006 y en un pueblo de la región de La Angostura, en el estado mexicano de Durango, se celebraba un tradicional baile local. En la pista coincidieron Emma Coronel Aispuro, quien había asistido con su novio; y Joaquín ‘El Chapo’ Guzmán. Ella tenía 17 años, él 52. Un amigo de Guzmán fue el encargado de acercarse a preguntar: “Que dice el señor que si quieres bailar con él”. Ella dijo que sí, sin que significara nada especial pues la tradición eso indicaba, según explicó en una entrevista al semanario Proceso en el 2016. Hoy, ambos están tras las rejas por cargos de narcotráfico. Guzmán purga una cadena perpetua y Coronel podría seguir la misma suerte de ser hallada culpable.