"En nombre de Nueva Zelanda quiero pedir disculpas a la familia de Grace. Su hija debió estar segura aquí, y no lo estuvo, y lamento eso".
Esas fueron las palabras de la primera ministra de Nueva Zelanda, Jacinda Ardern, en referencia al asesinato en ese país de la joven excursionista británica Grace Millane, que desapareció en la ciudad de Auckland el 1 de diciembre.
Millane, de 22 años, había llegado a ese país a mediados de noviembre en una etapa más de una gira por el mundo, tras graduarse de la Universidad de Lincoln, en el centro de Inglaterra.
Lo que había sido un operativo de búsqueda por la policía local, tras la alerta de sus padres, se tornó en una investigación de asesinato después de que se encontrara un cadáver en las afueras de la ciudad.
Un hombre de 26 años, cuya identidad debe mantenerse en reserva por cuestiones legales, ha sido acusado del asesinato y está citado a juicio el próximo mes.
Documentos presentados muestran que el acusado había estado viviendo en el Hotel Citylife, en el centro de Auckland, el último lugar donde Grace Millane fue vista con vida.
"Dolor y vergüenza"
El caso ha conmovido tanto a la sociedad neozelandesa como a los funcionarios públicos de un país que se jacta de la seguridad que le ofrece a turistas y visitantes.
En su rueda de prensa, la primera ministra Ardern manifestó que había un "abrumador sentido de dolor y vergüenza que esto haya sucedido en nuestro país".
El juez que lleva el caso reconoció que la pena de la familia Millane "debe ser desesperada".
El domingo, los investigadores descubrieron un cadáver -que todavía no ha sido identificado formalmente pero que creen corresponde a Grace Millane- a unos diez metros de una carretera rural en las afueras de la ciudad.
Documentos judiciales indican que la joven excursionista fue asesinada entre el 1 y el 2 de diciembre.
Grace Millane llevaba viajando sola dos semanas por Nueva Zelanda, después de una gira organizada de cinco semanas por Sudamérica.
Había llegado a Auckland el 20 de noviembre procedente de Perú, como parte de un viaje de un año por el mundo.
El 1 de diciembre, a eso de las 19:00 horas local, fue vista en el centro de la ciudad y, unos 15 minutos más tarde, fue captada por cámaras de circuito cerrado en Sky City, un complejo de hoteles, restaurantes, bares y casinos.
Más tarde esa noche, fue vista con un "acompañante masculino", en el Hotel Citylife, a una corta distancia de Sky City.
Su familia empezó a preocuparse cuando el día siguiente, 2 de diciembre, el cumpleaños de Millane, la joven dejó de comunicarse. Según su padre, David Millane, Grace "nos bombardeaba con numerosas fotografías y mensajes de sus aventuras", antes de desaparecer.
Después de reportarla como desaparecida, David Millane viajó a Nueva Zelanda para hacer un llamamiento público para asistir en la búsqueda de su hija.
Pero el 8 de diciembre, la policía anunció que había detenido a un sospechoso y estaba tratando el caso como asesinato. El hallazgo del cadáver en un área boscosa llamada Waitakere Ranges, pendiente de la identificación, parece ser definitivo.
El inspector de policía Scott Beard dijo que "se cree que es Grace" pero todavía había que identificarlo formalmente.
Añadió que "es un momento insoportable para la familia Millane y nuestros corazones están con ellos".
Declan Millane, uno de los hermanos de Grace, compartió una selección de fotografías de su hermana online, acompañadas de la letra de la canción "You Are My Sunshine".
La Universidad de Lincoln, de la que se la joven se había graduado hace unos meses, le rindió homenaje y dijo que su comunidad estaba "profundamente triste".
Tributos florales y notas de pésame han estado llegando a una plaza pública en su pueblo de Wickford, al noreste de Londres.
Los neozelandeses también han estado expresando su tristeza ante la noticia de su asesinato.
La parlamentaria Ruth Dyson fue una de las que ofreció sus condolencias en las redes sociales, tuiteando que su país compartía la pena de la familia Millane.