MARTÍN TUMAY SOTO @martintumay
El Comercio
La situación en Venezuela es insostenible. En entrevista con El Comercio, el alcalde metropolitano de Caracas, Antonio Ledezma, hace un pedido a la comunidad internacional y en especial al presidente del Perú, Ollanta Humala.
¿En qué situación se encuentra Caracas?
Hay gente que sigue manifestándose, principalmente, estudiantes inspirados en la doctrina de Ghandi de la no violencia. Lamentablemente continúa la política represiva del gobierno. Ayer (jueves) desataron una represión brutal contra una manifestación pacífica en Caracas. Estos mismos procedimientos se repiten en Táchira, Mérida, Maracaibo, Zulia.
¿Qué desató las manifestaciones?
Estas protestas comenzaron a principios de año, cuando una joven fue violada en un recinto universitario en Táchira. El gobierno en vez de responder garantizando la seguridad, respondió con una acción represiva. Esto es lo que ha disparado esta ola de protestas. Además de la inseguridad, también se protesta contra la inflación, la escasez y la falta de gobernabilidad.
¿A quiénes representan estos estudiantes?
Los estudiantes son los hijos de la familia venezolana, son la esperanza, son la vanguardia. Ellos vienen diciendo desde hace mucho tiempo que hay razones legítimas para que esta protesta cobre cada día más vigencia.
¿Están pidiendo que Nicolás Maduro deje el poder?
Lo que se pide es que se respete la Constitución. Se ha querido mostrar a los jóvenes que se manifiestan como golpistas. En ninguna parte del mundo los jóvenes dan golpes de estado. Los que dan golpes de estado son los militares. Los estudiantes lo que están pidiendo son respuestas afortunadas a los problemas económicos y sociales que vive el país, y de los cuales ellos no escapan.
¿Qué tiene que pasar para que esta crisis termine?
Es necesario que el gobierno dé respuesta a los problemas sociales y económicos. Además, a los problemas de violación de la Constitución. No se pide más que eso. Aquí hay una crisis institucional, no hay separación de poderes. Hay una crisis de gobernanza, porque el gobierno vive confrontando con todos los sectores. Hay un problema de inseguridad: desde el 2013 hasta ahora van más de 26.000 muertos. La escasez de alimentos y medicamentes también se agudiza diariamente. Esa es la realidad de Venezuela.
¿A qué se refiere cuando habla de represión?
Es una combinación de grupos civiles armados, que han sido empoderados por el propio gobierno desde hace muchos años, y la actuación de efectivos de la Guardia Nacional (policía militarizada). Evidentemente (ellos) son los que llevan adelante toda esta ola represiva.
Las protestas han dejado hasta el momento 17 muertos…
Lo que pedimos es que se haga justicia. No puede haber muertos buenos o muertos malos. Cualquier persona que haya perdido la vida, merece que se haga justicia… Es el gobierno quien genera la violencia. Cuando Maduro habla de paz y por otro lado van para reprimir a las manifestaciones, ese es un acto de provocación para ciudadanía.
¿Se están preparando nuevas movilizaciones?
Los estudiantes tienen una agenda de lucha pacífica. Hoy se está haciendo una concentración pacífica en la plaza Alberto Sadel, en el sector de Las Mercedes. Esperamos que no se repita la agresión del día de ayer (jueves).
¿El tema de los carnavales es una excusa para aplacar la ira de la gente?
El gobierno pretende disfrazar la realidad nacional. Estoy seguro que la mayoría de venezolanos, como están las cosas, no tienen planes de vacacionar… Es una situación de penuria la que está viviendo Venezuela.
¿Qué opina sobre la gira que ha emprendido el canciller venezolano Elías Jaua por los países sudamericanos?
Jaua está buscando apoyo para la represión. Mal puede la comunidad internacional asociarse con el lado represivo de la tragedia que estamos viviendo en Venezuela… Que los gobernantes escuchen muy bien a Elías Jaua, quien va a repicar solo una campana. Espero que escuchen la otra campana, la de los sectores democráticos que estamos luchando contra este autoritarismo.
¿Qué le diría al presidente Ollanta Humala si lo tuviese en frente?
Le pediría que nos ayude a evitar la violencia del Gobierno en Venezuela. Que nos ayude a lograr la libertad, la democracia que queremos todos los venezolanos… Los presidentes tienen una voz autorizada. Los presidentes pueden, desde lejos, advertirle a los gobernantes de Venezuela que se les está pasando la mano.
En el caso del Perú, le recordamos al presidente Humala que en Venezuela no se ha cumplido la auditoría para resolver el drama del resultado electoral del 14 de abril (que ganó Maduro), medida ratificada en la reunión de Unasur que se realizó en abril del año pasado en Lima. No le cumplieron la palabra empeñada a los peruanos y especialmente al presidente del Perú (que en ese momento era el presidente de la Unasur).
¿En general qué le parece el papel de los países de la región sobre la situación venezolana?
En algunos casos vemos que observan desde lejos y con un preocupante silencio. Nosotros esperaríamos, no intervención de gobiernos extranjeros, pero sí una palabra de solidaridad… Siempre le digo a la comunidad internacional que la solidaridad tiene que ser oportuna, porque después de consumados los hechos cualquier manifestación se convierte en pésame. La solidaridad ‘post mortem’ no tiene sentido.