El presidente de Estados Unidos, Donald Trump, afirmó durante una entrevista con la cadena de noticias Fox News que el general iraní Qasem Soleimani planeaba atacar cuatro embajadas de Estados Unidos en Medio Oriente antes de ser asesinado por fuerzas de su país.
“Puedo revelar que probablemente hubieran sido cuatro embajadas”, indicó el mandatario estadounidense en la entrevista afirmando que la información disponible apuntaba a que se trataba de una “amenaza inminente”.
► EE.UU. dice que asesinó a Soleimani porque planeaba volar su embajada en Bagdad
► El enfrentamiento que Irán le pudo ganar a Estados Unidos
“Iba a suceder”, recalcó Donald Trump quien anteriormente había justificado el asesinato de Qasem Soleimani porque “buscaba hacer estallar” una de sus dependencias diplomáticas, aunque no había detalles claros de que se estuvieran planeando ataques adicionales.
Temprano el secretario de Estado de Estados Unidos, Mike Pompeo, también había señalado que el general iraní tenía en la mira varias infraestructuras estadounidenses en Oriente Medio.
Soleimani preveía ataques “inminentes” contra “infraestructura estadounidense, incluidas embajadas estadounidenses, bases militares, instalaciones estadounidenses en toda la región”, señaló en una conferencia de prensa Mike Pompeo.
“Teníamos información precisa sobre una amenaza inminente”, dijo el Secretario de Estado.
“No sabemos exactamente qué día se habrían llevado a cabo, pero estaba muy claro, Qasem Soleimani estaba preparando personalmente un ataque a gran escala contra los intereses de Estados Unidos y estos ataques eran inminentes”, justificó a los periodistas tras detallar las nuevas sanciones económicas contra Irán.
Pompeo había insistido un día antes sobre la inminencia de los planes del comandante más popular de Irán, aunque mantenía las dudas sobre el lugar y la fecha en que se llevarían a cabo.
“No sabíamos exactamente cuándo y no sabemos exactamente dónde, pero eran reales”, había dicho al canal estadounidense Fox News el día anterior.
El asesinato del general iraní Qasem Soleimani en Bagdad profundizó las tensiones entre Irán, Irak y Estados Unidos, en medio a temores generalizados de una conflagración generalizada en la región.
Soleimani, un militar enormemente popular en su país, era un hombre clave en la influencia de Irán en toda la región del Medio Oriente.