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Su hija fue violada cuando tenía 13 años y ella quemó vivo al agresor. Se trata de María del Carmen García, o como es también conocida en España: la "madre coraje".
María del Carmen ha logrado que un juez de Vigilancia Penitenciaria le otorgue un permiso para que pueda salir de la cárcel con la condición de que regrese a dormir.
A pesar que quemar al agresor de su hija fue un acto premeditado, ella se confiesa arrepentida.
"Ojalá yo nunca lo hubiese hecho y él no hubiese violado antes a mi hija", dijo a un diario local de España.
El génesis de su condena en la cárcel empieza un 17 de octubre de 1998 cuando un hombre, armado con un cuchillo, violó a su hija de 13 años.
La justicia española condenó a al agresor de la menor con siete años de cárcel. Cuando este estaba en libertad, una tarde del 2005 la también llamada "madre coraje" se encontraba en un paradero esperando un colectivo se encontró con el agresor de su hija. Este le dijo: "¿Qué tal, señora? ¿Cómo está su hija?".
María del Carmen no soportó la burla y llegó hasta un grifo, compró una botella de combustible y salió con rumbo al bar donde se encontraba el violador.
La "madre coraje" quemó vivo al violador de su hija. El hombre no murió al instante. Falleció dos días después.
Por el asesinato, la "madre coraje" fue condenada a nueve años y medio de prisión, pero el Tribunal Supremo rebajó la condena a cinco años y medio. Ahora le queda esperar hasta agosto del 2018 para tener la libertad plena.
