Una misión de la Iglesia católica de Nicaragua, acompañada del nuncio apostólico, se dirige hacia la parroquia de Managua donde están atrincherados decenas de estudiantes y es atacada por fuerzas del gobierno, con saldo de al menos un muerto.
El cardenal Leopoldo Brenes junto al nuncio apostólico Stanislaw Waldemar Sommertag "se dirigen a la parroquia Divina Misericordia a mediar para sacar a los estudiantes y sacerdotes quienes han sido atacados durante toda la noche", informó la Conferencia Episcopal.
Según datos revelados por la iglesia, dos estudiantes ya han perdido la vida producto de disparos en el ataque por fuerzas del presidente de Nicaragua, Daniel Ortega.
El cardenal Leopoldo Brenes, presidente de la CEN, "pide al gobierno [de Daniel Ortega], quienes son los únicos responsables de estas acciones, detener esta masacre en contra de las personas dentro de la parroquia", agregó el mensaje.
El nuncio apostólico Stanislaw Waldemar Sommertag, el cardenal Brenes y otros obispos nicaragüenses realizan gestiones para lograr la liberación de los estudiantes.
El hostigamiento a la parroquia Divina Misericordia, en el suroeste de la capital, comenzó a eso de las 23H00 GMT del viernes, tras un ataque de policías y paramilitares a la Universidad Nacional Autónoma de Nicaragua (UNAN), al lado del templo.
Poco después del mediodía del viernes, policías, antimotines y paramilitares incursionaron en la UNAN para desalojar a los jóvenes que permanecían atrincherados desde el inicio de las protestas.
Los estudiantes son punta de lanza de un movimiento opositor que protesta desde el 18 de abril contra Ortega, que gobierna desde 2007 por tercer periodo consecutivo y a quien acusan de instaurar una dictadura con su esposa Rosario Murillo, marcada por la corrupción y el nepotismo.
Más de 270 muertos y unos 2.000 heridos deja la violencia desbordada en estos tres meses de protestas, según grupos humanitarios.
Fuente: Agencias