Beirut. Aviones franceses lanzaron el domingo una intensa ofensiva de bombardeos sobre la ciudad siria de Raqqa, el feudo del Estado Islámico en Siria, en una primera respuesta a los atentados de París, Francia, reivindicados por este grupo yihadista.
Menos de 48 horas después de los atentados que dejaron 129 muertos y más de 350 heridos en París, cazas franceses lanzaron una veintena de bombas en Raqqa, destruyendo un puesto de mando y un campo de entrenamiento, según el gobierno de Francia.
Doce aviones, incluyendo diez cazas, salieron de forma simultanea desde Emiratos Árabes Unidos y Jordania, una primicia desde el inicio de la intervención militar francesa en Siria en setiembre.
El operativo, que se realizó en coordinación con las fuerzas estadounidenses, fue llevado a cabo contra "objetivos previamente identificados durante misiones de reconocimiento realizadas por Francia", indicó el ministerio de Defensa.
Una serie de bombardeos franceses destruyeron el domingo por la noche un campamento de entrenamiento y depósitos de armas en Raqqa, confirmó el Observatorio Sirio de los Derechos Humanos (OSDH).
"Por la noche hubo al menos 36 explosiones en Raqqa, algunas causadas por bombardeos aéreos, otras por explosivos", informó el lunes a la AFP Rami Abdel Rahman, director del OSDH, que dispone de una red de fuentes en Siria.
"Las explosiones sacudieron toda la ciudad; hubo bombardeos al norte y al sur de Raqqa", añadió Abdel Rahman.
Entre los blancos, el OSDH citó la "brigada 17", un campamento de entrenamiento que alberga depósitos de armas. El director del Observatorio desconoce por el momento si hubo víctimas.
Por su parte, el ministerio de Defensa de Francia anunció que diez caza bombarderos franceses largaron 20 bombas el domingo por la noche en el norte de Siria, destruyendo un puesto de mando y un campamento de entrenamiento del Estado Islámico.
Este grupo yihadista reivindicó el sábado la oleada de atentados en París que el viernes causó al menos 129 muertos y más de 350 heridos.
Doce aviones, entre ellos diez cazas, participaron simultáneamente desde los Emiratos Árabes Unidos y Jordania en la operación en Raqqa.
El presidente de Francia, Francois Hollande, advirtió el sábado que su país sería "despiadado" tanto a nivel interior como exterior tras los atentados, que calificó de "acto de guerra".
Francia participa desde hace un año en la coalición internacional contra el Estado Islámico en Iraq y desde setiembre extendió sus operaciones a Siria.
Fuente: AFP