París [EFE]. El Gobierno de Francia endurecerá la aplicación de sanciones para quienes no respeten el confinamiento porque “hay todavía comportamientos bastante irresponsables” y considera probable que haya que prolongar el aislamiento obligatorio.
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“Sabemos que doce días es un periodo mínimo” y “es bastante probable que tengamos que prolongar el confinamiento”, explicó la portavoz del Gobierno francés, Sibeth Ndiaye, en una entrevista este viernes al canal “BFMTV”.
Recordó que el periodo de incubación del coronavirus es de 14 días y que se ha visto en otros países que es a partir de ese periodo cuando se ralentizaba el número de nuevos casos.
Preguntada sobre la puesta en marcha de medidas más estrictas de confinamiento, la portavoz del Ejecutivo respondió que en un primer momento se tiene que conseguir una toma de conciencia y a ese respecto las fuerzas del orden tienen también una función pedagógica.
Pero reconoció que “hace falta por lo menos endurecer la aplicación de sanciones” y no descartó que puedan aumentarse en el futuro las multas para los que incumplen, que ahora son de 135 euros. El dispositivo que se tramita en el Parlamento prevé la posibilidad de recurrir al toque de queda.
Ndiaye recordó las imágenes del pasado fin de semana, cuando miles de personas en París habían salido a parques, jardines y lugares de paseo, y descartó que el incumplimiento de las consignas sea algo que solo atañe a los barrios periféricos con importante población de origen inmigrante.
Los prefectos de las regiones de la costa mediterránea francesa y de buena parte de la costa atlántica han decidido prohibir el acceso a las playas para impedir que los ciudadanos las utilicen como zonas de recreo.
En Francia hay 10.995 casos confirmados de coronavirus y 372 muertos, aunque el ministro de Sanidad, Olivier Véran, estima que los casos reales rondan los 20.000.