Cómo Joe Biden está ignorando a la competencia demócrata

El ex vicepresidente de Estados Unidos, Joe Biden, inició su tercera campaña para ser electo como candidato presidencial del Partido Demócrata bastante después que sus adversarios, pero se está comportando como si ya hubiese ganado la nominación para los comicios del 2020.

Poco después de anunciarlo, Biden rápidamente tomó la delantera en las encuestas y en casi todos los sectores demográficos de Estados Unidos.

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No obstante, según el "New York Times", hay quienes opinan que esta ventaja inicial está relacionada a su pasado político, especialmente al hecho de que es más conocido que los demás candidatos por haber sido vicepresidente durante los dos gobiernos de Barack Obama. Además, hay muchos que creen que aún es muy temprano como para asegurar la nominación.

El presidente de Estados Unidos, Donald Trump, tiene previsto anunciar su candidatura para las elecciones presidenciales del 2020 esta tarde en Orlando, Florida. Sin embargo, los sondeos realizados por Fox News y Quinnipac University muestran a un mandatario debilitado por los escándalos que han caracterizado su gobierno y lo posicionan por debajo de varios candidatos demócratas.

Actualmente Biden es el candidato con mayor cobertura mediática y las encuestas lo muestran significativamente por encima de Bernie Sanders, el segundo candidato más popular del Partido Demócrata.

Un sondeo realizado por Quinnipac University sitúa a Biden en primer lugar con un 41% de los votos, mientras que Sanders se queda atrás con 14%. Según el New York Times, esta diferencia podría explicar el comportamiento de Biden durante su campaña y por qué, en vez de abordar las propuestas hechas por otros candidatos demócratas, ha decidido enfocarse principalmente en criticar a Trump.

Asimismo, a diferencia de los demás candidatos, Biden se ha mantenido más alejado de varios eventos, incluyendo la convención del Partido Demócrata, y ha viajado a menos estados que suelen ser importantes durante las primarias de su partido.

Su principal objetivo parece ser convencer a los votantes de que él es el candidato indicado para derrotar a Trump y devolver a Estados Unidos a una época menos agitada, como la que se vivió cuando Barack Obama dirigía el país y Biden era su vicepresidente.

Durante sus apariciones en público, ha esquivado preguntas sobre sus opositores, dando respuestas simples cuando se le interroga sobre las diferencias entre él y los otros candidatos.

En cambio, varios discursos durante su campaña han estado centrados en atacar directamente al presidente Trump.

Durante eventos de campaña en Iowa, Trump y Biden intercambiaron ataques. Biden describió a Trump como "una amenaza existencial para Estados Unidos" y Trump lo llamó “mentalmente débil”.

Estos discursos llenos de ataques mutuos parecen ignorar que Biden aún no ha ganado la candidatura demócrata y que todavía faltan 17 meses para las elecciones generales.