Madrid [EFE]. Una madrugadora versión del “Gordo” se dio en España. El número “26.590” cumplió con la tradición y repartió a primera hora de la mañana de este domingo millones de euros en siete provincias española. Volviendo a remarcar como al la lotería de Navidad más popular del país europeo.
Minutos después de las 9 de la mañana y cuando los niños del colegio de San Ildefonso todavía calentaban la voz en el escenario del Teatro Real de Madrid, salió el primer premio del sorteo, que como suele ser habitual, estuvo muy repartido.
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La administración de lotería más conocida de Madrid, "Doña Manolita", en el centro de la capital, una escuela de judo en un barrio humilde de Salamanca o un centro aragonés en la provincia catalana de Tarragona, fueron algunos de los lugares adonde viajó la suerte este 22 de diciembre, la fecha tradicional del sorteo de lotería de Navidad, que marca el comienzo de las vacaciones.
Los niños de la suerte
Las niñas Noura Akrouh y Elisabeth del Carmen Roque fueron las encargadas de “cantar” el premio, la ilusión de todos los niños del colegio de San Ildefonso que participan cada año en este sorteo, que ya tiene más de 200 años de historia. “Siempre como que nos ilusionamos y decimos que vamos a cantarlo nosotras, y este año ha tocado”, declaró a la prensa Elisabeth.
Badia, la madre de Noura procedente de Tetuán (Marruecos), también mostró la alegría por que su hija haya sido la voz del número más esperado del Sorteo Extraordinario de Navidad. “Estoy emocionada y contenta, me ha gustado mucho que haya sacado ‘el Gordo’, lo estábamos esperando”, declaró.
Los agraciados con el primer premio recibirán 400.000 euros (unos 443.000 dólares) por cada décimo, que es la décima parte de un billete, la forma en que se vende la lotería en España.
Dos horas después los niños sacaron el segundo premio, que recayó en el número 10.989, dotado con 125.000 euros (138.000 dólares) el décimo, mientras que el tercero fue en 00750, con 50.000 euros (55.000 dólares) el décimo.
Además de estos premios mayores, el sorteo también ofreció dos cuartos premios y ocho quintos, así como las conocidas "pedreas", 1.794 premios de 100 euros el décimo (110 dólares).
Una ilusión compartida
Tradicionalmente, los décimos de la lotería de Navidad se comparten con familiares, amigos y compañeros de trabajo, con lo que si toca, la felicidad se reparte y se multiplica.
Esta domingo, las imágenes de grupos de personas celebrando su suerte han copado las pantallas de televisión, los programas de radio, las páginas de los periódicos o las redes sociales. “Antes tenía muchos problemas con los bancos, ahora lo tienen ellos conmigo”, decía feliz un joven agraciado con “el Gordo” , hijo del dueño de un bar de un pueblo de Alicante (este), que repartió el premio.
Pero el principal beneficiado de este sorteo es la hacienda pública, que recibirá el 20 % de los premios superiores a 20.000 euros; los menores están exentos de impuestos.
Como la ilusión nunca se pierde, las ventas de la lotería de Navidad aumentan cada año. En esta ocasión, el incremento ha sido del 3,09 % respecto a 2018, hasta alcanzar los 2.906 millones de euros (3.200 millones de dólares).
Los décimos se pudieron comprar desde el verano, lo que facilita que muchos turistas que visitan España en esas fechas puedan comprarlos y que los españoles puedan hacerse con décimos en los lugares donde pasan sus vacaciones.
Además, como también se adquieren por internet, muchas personas que viven fuera del país también pueden tener la ilusión de ser agraciados con algunos de los premios.
Pero no es tan fácil. La probabilidad de que toque "el Gordo" es una de entre 100.000, aunque es mayor que, por ejemplo, acertar a la primera categoría en el sorteo del Euromillones (una entre 76 millones).
Este es un día de ilusión y esperanza en toda España, al menos hasta el mediodía, cuando termina el sorteo; después queda la celebración para los premiados y la decepción entre el resto, para los que queda el consuelo de pensar que lo importante es tener salud.