El Gobierno Galo busca limitar la vida social de quienes decidan no vacunarse contra el COVID-19 mediante un nuevo pase sanitario, como medida ante la enorme ola de contagios registrada en ese país que lo ha convertido en el actual epicentro de la pandemia en Europa. (Foto: Mohammed Badra / EFE)
El Gobierno Galo busca limitar la vida social de quienes decidan no vacunarse contra el COVID-19 mediante un nuevo pase sanitario, como medida ante la enorme ola de contagios registrada en ese país que lo ha convertido en el actual epicentro de la pandemia en Europa. (Foto: Mohammed Badra / EFE)
Agencia AP

El primer ministro , Jean Castex, informó que el lunes entrará en vigor un nuevo certificado de vacunación contra que restringe en gran medida la vida pública de quienes se niegan a vacunarse, al prohibirles el acceso a vuelos nacionales, restaurantes, eventos deportivos y otros lugares.

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El llamado pase “es necesario si queremos preservar y aumentar nuestra cobertura de vacunación en caso de nuevas variantes”, dijo Castex el jueves. El certificado de vacunación “pone claras restricciones a los no vacunados”, añadió.

A partir del lunes se exigirá la vacunación completa contra el COVID para entrar en restaurantes, bares, cines, teatros y otras instalaciones de ocio o deportes y para tomar trenes interregionales y vuelos internos. La medida aplica a todas las personas mayores de 16 años. El gobierno dijo que se prevén algunas excepciones para los que se han recuperado recientemente del COVID-19.

Castex también dijo que la ola de virus en Francia muestra signos de amainar, pero que la presión sobre los hospitales sigue alta, por lo que el gobierno quiere mantener las restricciones actuales durante 12 días más.

“Esta ola excepcional no ha terminado, pero sus efectos decrecientes son una señal positiva”, dijo el primer ministro en una conferencia de prensa en París.

Indicó que, a partir del 2 de febrero, ya no será obligatorio trabajar desde casa al menos tres días a la semana y se eliminará el requerimiento de mascarilla al aire libre. Las discotecas abrirán el 16 de febrero.

También a partir del lunes, los niños de 12 a 17 años podrán recibir una vacuna de refuerzo, dijo Castex.

El certificado de vacunación es clave para evitar que se propague la variante ómicron, dijo Castex, aunque admitió que la medida podría suspenderse “si el número de infecciones disminuye bruscamente y la carga de los hospitales se aligera de manera significativa”.

Francia ha sido el nuevo epicentro del virus en Europa debido a la propagación de la variante ómicron, la cual es altamente contagiosa.

En la última semana se ha registrado un promedio de más de 320.000 casos diarios. Sin embargo, el número de nuevos pacientes que ingresan en las unidades de cuidados intensivos de los hospitales disminuyó un 15% en el mismo periodo, lo que permite al gobierno confiar en que la situación mejore en las próximas semanas.

??Alrededor del 92% de los adultos franceses —más de 48 millones de personas— ya están vacunados por completo, y el 94% ha recibido al menos una vacuna.

El Parlamento francés aprobó la nueva disposición el fin de semana, tras un intenso debate de varias semanas. El Consejo Constitucional dará a conocer su evaluación el viernes.

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