Las restricciones al turismo impuestas por Rusia a Turquía, que incluían la prohibición a los operadores de vender viajes a ese país, quedaron levantadas el jueves, informaron autoridades rusas.
El primer ministro ruso, Dmitri Medvédev, dijo hoy que las autoridades turcas deben proporcionar "garantías adicionales de seguridad" a los turistas, en especial después del ataque terrorista del martes contra el aeropuerto Atatürk de Estambul, con 44 muertos.
El la víspera, el presidente de ruso Vladimir Putin ordenó levantar las sanciones contra Turquía en el sector turístico así como la "normalización" de las relaciones comerciales entre ambos países, tras mantener una conversación telefónica con su homólogo turco, Recep Tayyip Erdogan.
"Me gustaría comenzar por las cuestiones relacionadas con el turismo (...). Levantamos las restricciones administrativas en este ámbito" contra Turquía, declaró Putin en una reunión del gobierno ruso.
"Pido al gobierno que comience el proceso de normalización del comercio y de nuestras relaciones económicas", prosiguió.
El mandatario ruso hizo estos anuncios después de entrevistarse por teléfono con Erdogan por primera vez desde la entrada en vigor de las sanciones rusas contra Turquía a raíz de la grave crisis diplomática entre los dos país iniciada cuando un caza ruso fue abatido por la aviación turca en la frontera con Siria.
Durante esta conversación, los dos dirigentes acordaron reunirse y destacaron "la importancia de la normalización de las relaciones bilaterales entre Turquía y Rusia", según un comunicado de la presidencia turca.
Está previsto que Erdogan y Putin se reúnan en septiembre durante la próxima cumbre del G20 en China, anunció un responsable turco que requirió el anonimato.
Justo antes de llamar a su homólogo turco, Vladimir Putin expresó sus condolencias al pueblo turco tras el triple atentado en el aeropuerto internacional de Estambul.
Esta conversación telefónica es el primer contacto directo entre Putin y Erdogan desde el inicio de las tensiones diplomáticas entre Moscú y Ankara, en noviembre del 2015, por la muerte de un piloto ruso tras ser abatido su caza por la aviación turca.
►Erdogan se disculpa con Putin por derribar un caza ruso
El lunes, el presidente turco Recep Tayyip Erdogan había pedido disculpas a Moscú por este incidente.
El 24 de noviembre del 2015, un caza ruso Su-24 fue abatido cerca de la frontera siria. Uno de los dos pilotos murió cuando caía en paracaídas tras ser eyectado del aparato.
Turquía afirmó que el avión entró en su espacio aéreo e ignoró varias advertencias, lo que Rusia negó. Moscú reaccionó adoptando medidas de represalia contra Turquía, sobre todo a nivel comercial. Estas medidas iban desde restricciones comerciales hasta la prohibición de contratar a trabajadores turcos.
Fuente: Agencias