El activista irlandés Colm O'Gorman, víctima de abusos sexuales cometidos por el clero en Irlanda, afirmó que el mensaje lanzado por el papa Francisco a los supervivientes en Dublín es un "vergonzoso intento" de evitar asumir su responsabilidad.
O'Gorman, director también de Amnistía Internacional (AI) en Irlanda, consideró que el pontífice tenía la "oportunidad perfecta" para abordar este asunto, en la primera jornada del viaje de dos días que efectúa a la isla para participar en el Encuentro Mundial de las Familias.
"Una oportunidad para hablar claro, para decir la verdad a la gente de Irlanda. De nuevo, se ha negado a hacerlo. Aún peor, ha desviado la atención extraordinariamente", escribió el activista en su cuenta de Twitter.
En declaraciones a los medios, O'Gorman también opinó que, en su intervención en el Castillo de Dublín, el papa argentino se dirigió a "los fieles", en vez de a toda la ciudadanía, como le correspondería, según él, por su papel de "jefe de Estado" del Vaticano.
"Podía habernos hablado a todos de una manera contundente, clara, franca, humana, accesible. Claramente, rehusó hacerlo. Francamente, es una gran vergüenza", agregó.
El papa reconoció en Dublín el fracaso de la Iglesia irlandesa en afrontar adecuadamente lo que denominó "crímenes repugnantes de los abusos" a menores y pidió esfuerzos para adoptar normas severas para que no se vuelvan a repetir.
Francisco efectuó esas declaraciones en un discurso a las autoridades en el Castillo de Dublín, después de la intervención del primer ministro irlandés, el democristiano Leo Varadkar, quien le pidió que use su "influencia" y su "posición de mando" para que la Iglesia colabore en el esclarecimiento de todos los casos pendientes y futuros.
A este respecto, el papa recordó que en su última carta a todos los católicos sobre los abusos, publicada antes de viajar a Irlanda, "ha pedido empeño, incluso un mayor empeño, para acabar con este flagelo en la Iglesia, y a cualquier coste moral y de sufrimiento".
El Vaticano ha confirmado que Francisco se reunirá en Dublín en privado con víctimas vivas de los abusos, quienes podrán dar después detalles de este encuentro si así lo desean, aunque la Santa Sede ha resaltado que la visita se centrará en la "familia".
Fuente: EFE.