El comando de la Policía Nacional adscrito al Magdalena Medio le confirmó a EL TIEMPO un hecho de intolerancia que se presentó en el municipio de Santa Rosa, sur del departamento de Bolívar, Colombia.
Según las autoridades, dos jóvenes, uno de nacionalidad venezolana, fueron señalados por la comunidad de cometer robos y otros hechos delictivos en esa población, y fueron retenidos.
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Ya habían sido capturados delinquiendo
La comunidad, enfurecida, los amarró a dos motos y fueron obligados a correr a la velocidad de los automotores por las calles del pueblo, mientras eran perseguidos por otros motociclistas que lanzaban piedras y otros objetos contundentes.
”El día lunes, siendo aproximadamente las 9 de la noche, dos personas fueron aprehendidas por la comunidad y conducidas por diferentes calles del municipio de Santa Rosa. Estas personas, de 23 y 28 años de edad, uno de ellos de nacionalidad venezolana y el otro oriundo del municipio de Simití eran señaladas de cometer robos en los barrios de este municipio”, señaló el mayor Carlos Ardila Pérez, comandante del Distrito de Policía del municipio de Santa Rosa, sur de Bolívar.
Sin embargo, ante las indagaciones de la Policía, no hubo una sola denuncia de los ciudadanos que puntualizara que estas personas hubieran cometido algún delito minutos antes de la agresión por parte de la multitud.
Debieron salir de la población para proteger sus vidas
Los dos jóvenes fueron llevados a la estación de Policía del pueblo donde les protegieron sus vidas. Horas después fueron entregados a sus familiares y, según la Policía, debieron salir de la población para proteger sus vidas.
No obstante, la Policía confirmó que estos dos hombres ya habían sido capturados en el pasado por los delitos de “hurto y porte y tráfico de estupefacientes, y hacía 15 días un sujeto de nombre Jean Carlo, de 23 años, había sido capturado en un hotel de la población cuando pretendía hurtar un televisor.
Esta persona afronta un proceso en la Fiscalía General de la Nación y estaba en libertad, y ahora será sindicado de continuar delinquiendo”, señaló el oficial.
“Hacemos un llamado a la comunidad para no hacer justicia por mano propia y verse involucrados en delitos como homicidio, asonada o lesiones personales”, agregó el mayor Carlos Ardila Pérez.