El magistrado Luis Barroso, de la Corte Suprema de Brasil, suspendió este viernes todos los efectos de una normativa dictada por el Gobierno de Jair Bolsonaro que impedía a las empresas despedir a empleados que no se hayan vacunado contra la covid-19.
Según esa normativa, exigir la vacunación supone una “práctica discriminatoria” equivalente a otras relativas a raza, edad, sexo o deficiencias, y no podría ser motivo de despido, aún más cuando el Gobierno no ha implantado la obligatoriedad de la inmunización.
- El juez más famoso de Brasil entra a pelear contra Bolsonaro y Lula
- Aumenta flujo de migrantes de Brasil y Venezuela en el norte de México
- Brasil registra 188 muertes por coronavirus y 15.300 contagios en un día
Sin embargo, de acuerdo con la decisión cautelar del juez Barroso, una persona no vacunada “puede ser una amenaza para la salud de otros trabajadores”, representar “riesgos para el ambiente laboral y comprometer la salud de las personas que interactúan con empresas”.
En su decisión, el magistrado puntualizó que “el país y el mundo enfrentan una pandemia de graves proporciones” y que “la covid-19 se ha mostrado altamente contagiosa y es responsable, en Brasil, por una impresionante cifra que supera los 600.000 muertos”.
En ese marco, subrayó que decisiones anteriores de la Corte Suprema ya han establecido que “los derechos individuales deben ceder frente al interés de la colectividad como un todo, en el sentido de la protección del derecho a la vida y la salud”.
El Ministerio del Trabajo, responsable de la normativa, adelantó que pretende apelar ante el pleno del Supremo, alegando que aquellos ciudadanos que no han querido vacunarse contra el coronavirus “no pueden ser tratados por el resto de la sociedad como una especie de ‘leprosos’, que no pueden convivir en ambientes de trabajo”.
El presidente Bolsonaro, líder de una negacionista ultraderecha, es uno de los mandatarios más escépticos frente a la gravedad de la covid-19, que ha llegado a tildar de “gripecita”, y también ha mostrado una enorme desconfianza en las vacunas.
Recientemente, Bolsonaro llegó al extremo de asegurar que aquellas personas que han tomado las dos dosis de alguna vacuna se enfrentan ahora a un mayor riesgo de contraer sida, una afirmación que desató una ola de indignación y fue desmentida por todas las asociaciones médicas y científicas del país.
__________________________________
VIDEO RECOMENDADO
TE PUEDE INTERESAR
- 11-S, los atentados que hace 20 años estremecieron a Estados Unidos en la voz de sus protagonistas
- Cómo Al Qaeda pasó del terror global a un débil liderazgo 20 años después del 11 de septiembre
- Las imágenes inéditas del 11-S que publicó el servicio secreto de EE.UU. a 20 años del atentado | FOTOS
- “Sobreviví al 11-S porque llegué más tarde a trabajar a las Torres Gemelas. Y a veces me siento culpable”
- Por qué la CIA no detectó los ataques del 11S (pese a todas las señales que tuvo)
- Las razones por las que EE.UU. dice adiós a las grandes intervenciones militares en el 20 aniversario del 11
Contenido sugerido
Contenido GEC