Ciudad de Guatemala. El ex dictador guatemalteco Efraín Ríos Montt, de 88 años, debió comparecer hoy en camilla al reinicio del juicio en su contra por genocidio y falta de deberes a la humanidad.
La reactivación del juicio, que podría durar al menos dos meses, fue cumplida por el Tribunal Primero B de Mayor Riesgo, que ordenó la comparecencia del acusado tras rechazar una excusa médica planteada más temprano por la defensa para que Ríos Montt no acudiera a la corte.
A su vez, la jueza presidenta del tribunal, Jeaneth Valdez, rechazó la recusación en su contra planteada por la defensa, que adujo que la magistrada había adelantado opinión sobre los hechos que competen al caso en su tesis doctoral en materia penal.
La fiscalía y los abogados que representan a los querellantes respaldaron la posición de Valdez y advirtieron que la recusación en su contra pretendía "retrasar el proceso".
En un traslado espectacular, a bordo de una ambulancia y vehículos con insignias policíacas con sonido abierto de sirenas, Ríos Montt fue llevado de su casa a la Torre de Tribunales luego de que el tribunal fijara un plazo de 120 minutos de espera. De lo contrario sería declarado en rebeldía.
Ríos Montt fue acompañado en la ambulancia por su hija, la ex diputada guatemalteca Zury Ríos, quien se encuentra en plena campaña política de cara a los comicios generales de setiembre próximo.
El ex dictador guatemalteco (1982-1983) llegó al edificio con el rostro cubierto por la sábana de la camilla que también cubría su cuerpo. Ya en la audiencia su rostro fue descubierto, pero permaneció acostado en la camilla.
El reinicio del juicio estaba programado para primera hora de la mañana de este lunes, pero la falta del expediente original impidió su activación inmediata.
A la hora establecida habían acudido las partes procesales, así como el otro acusado en el mismo proceso, el también general retirado Mauricio López Sánchez, ex jefe de Inteligencia del gobierno de facto de Ríos Montt.
Ríos Montt es juzgado por la muerte a manos de militares durante su gobierno de facto -en el que también fue jefe supremo de las Fuerzas Armadas- de 1.771 indígenas de la etnia maya Ixil, en las montañas del conflictivo departamento de Quiché, en el norte de Guatemala.
Foto: AP
El 10 de mayo del 2013 Ríos Montt fue sentenciado a 80 años de prisión por genocidio por el Tribunal Primero A de Mayor Riesgo. No obstante, diez días después, la Corte de Constitucionalidad (CC) anuló parte del juicio ante una acción de la defensa, por lo que la sentencia emitida quedó anulada y se debe repetir el proceso. Eso permitió que el militar regresara a su casa, donde se mantiene bajo arresto domiciliario.
El otro juzgado, Rodríguez Sánchez, fue absuelto, pero ante la anulación de la sentencia se encuentra nuevamente en el banquillo.
Fuente: DPA