Una colecta para ayudar al indigente que arrojó un carrito de supermercado contra el autor del ataque terrorista del viernes en Melbourne, que se saldó con la muerte de un transeúnte, logró recaudar más de 102.000 dólares australianos (unos US$73.643).
La campaña "No todos los héroes usan capa", que se difunde por la plataforma Gofundme y que inició el Colectivo Nacional para los Indigentes, destinará los fondos a ayudar a Michael Rogers, un hombre que ha estado varias veces en la cárcel y que no tiene vivienda.
Rogers ganó notoriedad al difundirse las imágenes en las que aparecía arrojando un carrito de la compra contra Hassan Khalif Shire Ali cuando este amenazaba con un cuchillo a dos policías y poco antes de que fuera abatido por un disparo policial.
El gesto de Rogers le ha valido el apodo de "Trolley man" (el hombre del carrito), quien "arriesgó su vida ese día sin pedir nada a cambio y eso es algo que no tiene precio", según el Colectivo para los Indigentes de Melbourne.
En una entrevista publicada anoche por el diario The Age de Melbourne, Rogers comentó que le da pena que su abuela, quien murió en 2013 mientras él cumplía una condena por robo agravado, no estuviera viva para ver su gesto.
Pese a "no tener buenas experiencias con la Policía", Rogers decidió tomar un carrito que vio en la calle y ayudar a los agentes que intentaban controlar a Shire Ali porque pensó que en ese momento "quería ayudar y hacer algo bien por primera vez en mi vida".
Además de haber estado durante dos décadas entrando y saliendo de la cárcel, Rogers, de 46 años, pasó su infancia en viviendas públicas y su madre era adicta a la benzona.
Fuente: EFE