La Contraloría General de la República informó que el ex alcalde de la Municipalidad Distrital de Talavera, en Apurímac, y un proveedor de la misma, no irán a la cárcel, sino que realizarán trabajo comunitario, a pesar de que fueron hallados culpables del delito de colusión.
Según comunicó el órgano de control, se trata de un hecho sin precedentes que afecta la lucha contra la corrupción.
Hace una semana, Juan Ricardo Reynoso Gutiérrez y Fernando Lucas Jamanca fueron sentenciados por la comisión del delito contra la administración pública en agravio de la Municipalidad Distrital de Talavera y se les impuso cuatro años de pena privativa de la libertad efectiva.
Sin embargo, en la sentencia del Juzgado Unipersonal de Apurímac se precisa que la condena "se convierte en doscientos ocho jornadas de prestación de servicios a la comunidad".
Reynoso desempeñó el cargo de alcalde distrital en el periodo 2007 - 2010. Fue elegido por el Movimiento Regional Kallpa.
Debió cumplir prisión efectiva
Roberto Miranda, abogado penalista, manifestó a El Comercio que en casos como este, la pena de cárcel efectiva podría convertirse en condena suspendida, pero que este cambio a trabajo comunitario se observa irregular. Calificó el hecho de "aberración jurídica".
"La concusión, el peculado, colusión etc, de acuerdo a la Constitución, tienen el doble de prescripción, son delitos perseguibles de oficio con sanción que debería ser efectiva", precisó.
El tema se agrava, debido al cargo y función de Reynoso. "Estamos hablando de una máxima autoridad de un gobierno local, que ha sido elegida por mandato popular y le debe su función pública al pueblo que lo eligió", agregó.