Un niño de ocho años se salvó de morir luego de pisar una mina casera colocada sobre montículos de arena en la ciudad de Chiclayo. El artefacto había sido instalado en las afueras de una empresa chancadora de piedra en el pueblo joven El Nazareno de José Leonardo Ortiz.
Según testigos, el niño caminaba por el exterior de la chancadora "Petreos y Concretos S.R.L.", cuando de pronto se escuchó una explosión. El estallido le causó lesiones en el brazo derecho y parte del rostro.
Su hermana, que se encontraba cerca al lugar, corrió en su ayuda y pidió apoyo a efectivos policiales de la zona.
Como parte de las investigaciones, el personal de la Unidad de Desactivación de Explosivos (Udex) detectó que el hecho ocurrió producto de la explosión de dos artefactos caseros, consistentes en dos ratoneras de metal amarradas a dos ladrillos y sobre ellas un paquete de tres pirotécnicos, más conocidos como "napoleones".