El recluso Luis Enrique Vegas Vásquez, de 36 años, fue sorprendido con 300 gramos de pasta básica de cocaína y cuatro celulares camuflados en sus muletas de madera, cuando ingresaba al penal de Piura luego de pasar por un chequeo médico.

Agentes del Instituto Nacional Penitenciario (INPE) lo intervinieron en el área de control al percatarse que sus muletas no eran las mismas que usaba cuando salió del centro de reclusión. Por ello procedieron a abrirlas y descubrieron la droga y los equipos.

La policía presume que las muletas habrían sido cambiadas en el centro médico con ayuda de un familiar.

El interno, quien lleva 12 años preso y purga una condena de 35 años por homicidio calificado, reconoció su delito. "Quiero apoyar a mi familia por la operación que he tenido", dijo a la prensa.

De acuerdo con información del INPE, en lo que va del año los agentes de seguridad detuvieron a 15 personas que trataron de ingresar celulares al penal de Piura.

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