En cada islote de totora, donde viven entre tres a cinco familias, ninguna suele armar por Navidad un nacimiento, mucho menos un árbol navideño con luces multicolores o bolas de cristal. (Foto: Carlos Fernández)
Navidad
Carlos Fernández

Para los niños de las islas flotantes Ccapi Uros, en Puno, la Navidad es una festividad poco conocida. Cuando se les pregunta cómo celebran esta festividad, solo sonríen.

Juanito, uno de los 38 niños de la escuela primaria 70052, asocia la fiesta de la Navidad con juguetes o ropa que suelen llevarles algunas organizaciones o instituciones.

En cada islote de totora, donde viven entre tres a cinco familias, ninguna suele armar por Navidad un nacimiento, mucho menos un árbol navideño con luces multicolores o bolas de cristal.

Los padres de Juan, de siete años de edad, comentan que la fecha de Navidad es una más en su cotidiano vivir en las islas. Ese día, la mayoría de las 78 familias que viven en el sector Ccapi Uros siguen con sus faenas de pesca y recolección de huevos entre los totorales.

“No cocinamos ni comemos nada especial, un simple plato de caldo con pescado carachi (oriundo del Titicaca) o pejerrey, es nuestro alimento de ese día, como todos los días. No tenemos dinero para comprar panetón o chocolate”, refiere la mamá de Juanito.

Ccapi Uros es un sector alejado y casi aislado de las otras 98 islas flotantes de totora que sí son visitadas por turistas nacionales y extranjeros. Estas últimas están ubicadas frente a la ciudad de Puno, en cambio Ccapi Uros está mucho más distante.

Samuel Pacompia Quispe, presidente de la asociación de familias de Ccapi Uros, incluso refiere que se sienten auténticos habitantes Uros.

-Una Navidad diferente-
Aunque en Ccapi Uros las celebraciones de Navidad pasan desapercibidas, la mañana del martes los niños pasaron momentos de alegría por la visita de un grupo de jóvenes estudiantes extranjeros y de Lima, asociados al Rotary Club Internacional, que visitaron esa zona llevando juguetes y ropa.

Además de entregar esos obsequios, jugaron, bailaron y cantaron junto a los niños. “A veces otros vienen a regalarnos juguetes, pero nunca hicieron bailar y cantar como ellos”, repetían los niños.

Un total de 110 niños de las instituciones educativas inicial, primaria y secundaria de Ccapi Uros tuvieron un día inolvidable con los estudiantes de países como Italia, Dinamarca, Bélgica, Francia y Estados Unidos que llegaron hasta ese sector.

En esa actividad también participó personal de la Marina de Guerra del Perú. Además de hacer entrega de ropa, realizaron atenciones médicas y de odontología a los niños, proporcionando medicamentos a quienes lo necesitaban.

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