asesinato
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Luis García Bendezú

Los homicidios han recrudecido en el Perú en los últimos años. Según el más reciente informe del Instituto Nacional de Estadística e Informática (INEI), el año pasado se contaron 2.435 casos, lo que arroja una tasa nacional de 7,7 por cada 100 mil habitantes. Si se contrasta esta cifra con la reportada en el 2011 (5,4 por cada 100 mil), hay un incremento del 42,6%.

El informe del INEI titulado “Homicidios en el Perú, contándolos uno a uno” también muestra la evolución de los homicidios en las regiones. Así, Ucayali, Tumbes, Apurímac e Ica fueron las que escalaron más puestos en el ránking nacional desde el 2011. El caso más crítico fue Tumbes, cuya tasa pasó de 4,9 homicidios por cada 100 mil habitantes en el 2011 a 22,9 en el 2016 (un crecimiento del 367%). Esta región ocupa el primer lugar desde el 2012.

Resalta también la violencia que se registra en Ica, una de las regiones con menor pobreza monetaria y mejor desempeño económico del país. Allí, la tasa de homicidios subió de 4,4 en el 2011 (un punto por debajo del promedio nacional de ese año) a 9,6 el año pasado (1,9 por encima del promedio del país).

Entre el 2011 y el 2016 hubo regiones que mantuvieron los mismos niveles. Madre de Dios y el Callao, por ejemplo, continúan entre las cuatro regiones con más homicidios en ese período. Esto pese a las operaciones que realiza el Gobierno en Madre de Dios contra delitos vinculados a la minería ilegal y a pesar del estado de emergencia que se decretó en el Callao por 315 días, entre el 2015 y el 2016.

En cuanto a las regiones que lograron reducir la tasa de homicidios destacan San Martín, La Libertad, Arequipa y Tacna. San Martín, por ejemplo, ocupaba el tercer lugar de la lista en el 2011 con una tasa de 12,1 casos por 100 mil habitantes. El año pasado, su tasa bajó a 8,3 y ocupó el décimo lugar de la tabla.

El caso de La Libertad, uno de los sectores más golpeados por el sicariato y la extorsión, también es interesante. En esa región, la tasa de homicidios disminuyó de 12,9 a 9,3 en el período evaluado. Según William Rabanal, ex miembro de la Fiscalía Especializada en Criminalidad Organizada, esto respondería a la desarticulación de más de 20 grandes mafias en los últimos cuatro años.

No obstante, el sicariato sigue desangrando a La Libertad, la segunda región con más casos registrados el año pasado, después de Lima Metropolitana. En total, 33 personas fueron asesinadas el año pasado por sicarios en las provincias de Trujillo, Virú y Ascope, según el INEI.

—Cifras recalibradas—
Los informes del INEI integran información de entidades como la policía, el Ministerio Público y el Poder Judicial. Se emiten desde hace tres años por encargo del Comité Estadístico Interinstitucional de la Criminalidad, que se propuso en el 2013 “proveer estadísticas confiables sobre el fenómeno de la delincuencia”.

El primer informe integrado sobre homicidios del INEI se difundió en setiembre del 2014 y arrojó datos sobre los casos registrados entre el 2011 y el 2013. Las tasas nacionales que se reportaron fueron 5,4 (2011), 6,5 (2012) y 6,6 (2013) homicidios por cada 100 mil habitantes.

Hasta antes del informe, el Gobierno manejaba una tasa de 24 homicidios por cada 100 mil habitantes en el 2011, similar a la de Colombia en la actualidad. En mayo del 2014, la dirección del INEI señaló que esa cifra había sido mal recolectada y “sobrevalorada”.

Al respecto, el ex ministro del Interior Fernando Rospigliosi ha cuestionado varias veces la verosimilitud de las cifras oficiales del Gobierno. “Yo tengo dudas. [Según la tasa] parece que estamos igual que Chile o Uruguay, que son países donde no hay fenómenos como el narcotráfico o el sicariato”, dijo ayer en diálogo con El Comercio.

De acuerdo al INEI, la tasa de homicidios del Perú en el 2015 (que era de 7,2) está entre las más bajas de Latinoamérica, por debajo incluso que la de Uruguay (8,4).

*Con las colaboraciones de Johnny Aurazo y Jorge Falen.

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