El exasesor político de Keiko Fujimori, Pier Figari Mendoza, desistió este martes de su pedido para que cese la orden de prisión preventiva por 18 meses dictada en su contra en el marco del proceso que se le sigue por presunto lavado de activos.
Figari argumentó que tomó esta decisión debido a que el Tribunal Constitucional (TC) indicó, en el fallo que anuló la prisión de Keiko Fujimori, que ya no existe “ningún peligro de obstaculización”.
“En efecto existe un desestimiento y quisiera manifestar la razón. Sucede que como es de público conocimiento, el Tribunal Constitucional, se ha pronunciado respecto de este expediente declarando nulas las resoluciones de instancias anteriores, señalando que ya no existe el peligro procesal de obstaculización a la justicia en los 13 meses y algo más que vengo recluido”, sostuvo a través de videoconferencia desde el penal Ancón II, donde se encuentra recluido.
"No existiendo obstaculización, considero que deviene innecesario insistir en un mecanismo de cese toda vez que existen resoluciones que han declarado inconstitucional la medida en mi contra. Entiendo que ya ha sido remitida a su despacho la resolución del TC y por lo tanto se solicita la excarcelación, a igual razón, igual derecho", agregó Figari.
Por esta razón, el juez del Cuarto Juzgado de Investigación Preparatoria, Víctor Raúl Zúñiga, declaró el desestimiento del cese de prisión preventiva que había pedido Pier Figari.
Figari cumple una orden de prisión preventiva desde noviembre del 2018 por orden del juez Richard Concepción Carhuancho. La fiscalía lo investiga por presuntamente pertenecer a una organización criminal dedicada al lavado de activos al interior de Fuerza Popular para recibir y disponer de aportes ilícitos de Odebrecht.