Cuñado de Vizcarra defiende contratos con el Estado: “Las cosas de casa quedan en casa”

Fredy Herrera Begazo defendió los “servicios personalísimos” que brindó al Estado y afirmó que no tenía ningún impedimento para seguir contratando, incluso, cuando su cuñado, el presidente Martín Vizcarra, había asumido altos cargos en el Ejecutivo desde el 2016.

Ante la Comisión de Fiscalización, Herrera, contador público de profesión, dijo que aunque hay una relación familiar que lo une al mandatario, los servicios que prestó hasta mayo del 2019 en el Programa Subsectorial de Irrigaciones (PSI), adscrito al Ministerio de Agricultura y Riesgo (Minagri), debían mantenerse en el ámbito privado.

En su presentación, Herrera Begazo respondió que no informó al PSI sobre su vínculo familiar con Vizcarra porque “no tendría por qué hacerlo”, y tampoco dio a conocer sobre los contratos en curso a su cuñado, el presidente de la República. A quien sí le hizo saber esto fue a su esposa, Doris Vizcarra Cornejo, hermana del presidente.

“A mi esposa, de hecho, se comparte en casa, fuera de casa no compartimos aspectos laborales. Las cosas de casa quedan en casa”, alegó Herrera. El programa “Cuarto Poder” reveló que el cuñado del mandatario recibió del PSI más de S/320 mil por sus servicios desde el 28 de julio del 2016 hasta el 2019.

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Interpretaciones

Fredy Herrera, de 57 años y natural de la ciudad de Ilo (Moquegua), llevó curso de especialización en resolución de conflictos sociales y bajo esa razón firmó, desde mayo del 2015 hasta mayo del 2019, órdenes de servicio con el PSI. Según su testimonio, este organismo solicitó sus servicios para obtener la licencia social de las comunidades de influencia de los proyectos Paltuture y Yanapuijo, en Arequipa.

“La naturaleza del servicio nació en el 2015, es una naturaleza personalísima bajo el principio de buena fe contractual y continua. Tiene la naturaleza de servicio personalísima continua y sostenible en el tiempo”, repitió Herrera en al menos tres momentos de su exposición. “Consulté con especialistas, que dijeron que no tenia ningún impedimento para contratar porque mi contrato empezó el 2015, cuando no existía injerencia política”, insistió.

Bajo esta misma razón, el cuñado del presidente defendió sus contrataciones posteriores, al ser interpelado por las que fueron firmadas del 2016 al 2019. “La naturaleza del servicio nació en el año 2015, tenemos que recordar eso. Es una naturaleza personalísima”, repitió. Cabe recordar que Martín Vizcarra asumió en marzo del 2018 la presidencia de la República tras la renuncia de Pedro Pablo Kuczynski.

Según Herrera y su abogado, Emerson Gómez Oré, los contratos que tuvo con el PSI están amparados en el artículo 5 de la Ley de Contrataciones del Estado. “El carácter negociador lo contempla el artículo 5 de la Ley de Contrataciones del Estado, donde exonera de toda prohibición de contratar con el Estado estos servicios de negociación y conciliación. Es negociación por lo variado de los conflictos”.

Sin embargo, el artículo 11 de la misma ley indica que están impedidos de contratar con el Estado “el cónyuge, conviviente o los parientes hasta el segundo grado de consanguinidad o afinidad” de quienes ejercen la función pública en el cargo de presidente, vicepresidente, congresistas u otros.

Víctor Baca, abogado especialista en contrataciones con el Estado, dijo esta semana a El Comercio que, de acuerdo con la normativa, Herrera estaba impedido de hacer estas contrataciones. Explicó que aunque la prohibición no es retroactiva, el cuñado del presidente firmó nuevos contratos luego de julio del 2016, por lo que el impedimento se mantenía.

“¿En qué parte de la ley dice que la continuidad en el servicio exonera lo previsto en el artículo 11?”, cuestionó la congresista Carolina Lizárraga a Herrera. La pregunta fue respondida por el abogado Gómez en el mismo sentido que había sostenido previamente Herrera: “al ser un servicio personal, continuo y sostenible, esta se subsume en la labor conciliatoria, y al ser así se encuentra excluido del ámbito de aplicación de la Ley de Contrataciones”.

Por su parte, el congresista Edgar Alarcón, presidente de la comisión, sostuvo que las 20 órdenes de servicio de Herrera, del 2015 al 2019, tienen por concepto la contratación del servicio y no, específicamente, las de un conciliador. “Otra cosa es la interpretación que le quieren dar”, añadió. A su turno, Herrera respondió que su contratación fue para “lograr la licencia social, y para eso hay que conciliar”.

Finalmente, aunque según Herrera las órdenes de servicio que firmó fueron “una seguida de otra, sobre una misma la labor”, la congresista Lizárraga le rebatió que, entonces, no se tratarían de órdenes continuas. Por otro lado, Herrera no respondió de manera concreta la pregunta hecha por la congresista respecto a si presentó declaraciones juradas al PSI cuando firmó cada una de sus órdenes de servicio.

-¿Presentó declaraciones juradas con cada contrato con el PSI?

Las que me exigía la contratación del PSI.

-¿Cuáles eran estas?

Obra en poder de la institución [PSI].

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