PPK, Keiko Fujimori
PPK, Keiko Fujimori

La renuncia de Alfredo Thorne al Ministerio de Economía ha traído consigo una tregua a los constantes enfrentamientos protagonizados por la administración de Pedro Pablo Kuczynski () y la oposición, representada en su máxima expresión por los 72 escaños pertenecientes a Fuerza Popular.

Sin embargo, la cercanía del discurso por Fiestas Patrias y de los balances obligatorios que se efectúan por la fecha fuerzan al gobierno a extender el período de calma, tomando en cuenta, también, que otros miembros del Gabinete han estado hasta hace poco en la mira de la oposición.

Por ello, el primer ministro, ha sostenido durante la semana pasada que el gobierno no tiene problemas en promover un diálogo, especialmente con las bancadas de oposición.

"Estamos siempre abiertos al diálogo, así siempre lo hemos hecho con los diferentes partidos políticos […] Siempre estaremos dispuestos al diálogo, que es tan importante para el desarrollo", ha aseverado el también ministro de Economía.

La pregunta, por tanto, cae de madura: ¿Qué posibilidades hay de que una eventual convocatoria tenga éxito?

El analista político Luis Nunes estima que desde que se configuró el panorama tras la victoria de PPK en la segunda vuelta, el nuevo oficialismo debió dar una mejor lectura a los resultados y trabajar en una estrategia para lograr acuerdos con las principales fuerzas políticas del país. De momento, el objetivo no ha sido cumplido.

“Por el comportamiento de los que ganaron y de los que perdieron, la posibilidad se hizo complicada. Hay que reconocerlo. Ahora es importante que el gobierno dé muestras de querer conversar. Tan cercanos al 28 de julio, estoy convencido de que la gente pide que se le baje el tono al enfrentamiento. Un diálogo es factible”, señala.

Asimismo, Nunes considera que el Acuerdo Nacional u otros espacios similares no son necesariamente idóneos para la gestión de una conversación de términos netamente políticos. “Estamos hablando de la necesidad de un diálogo distinto”, sostiene.

Para el analista político Luis Benavente, sin embargo, el panorama de un eventual diálogo no sería tan favorable, pues el anuncio de Pedro Pablo Kuczynski de la evaluación de un posible indulto al encarcelado ex mandatario Alberto Fujimori podría generar un rechazo tajante por parte de ciertos sectores.

“Es difícil calcular qué pasaría si se formaliza una convocatoria. A la complicada coyuntura se le ha agregado la posibilidad de un indulto, y eso puede generar que no todas las bancadas quieran participar. Además, el fujimorismo no respondió claramente a lo que dijo [Mercedes] Aráoz la semana pasada sobre una conversación entre PPK y Keiko Fujimori”, menciona.

El director de Vox Populi añade que el Frente Amplio y Acción Popular no están de acuerdo con la posibilidad de una gracia presidencial a favor de Alberto Fujimori. Por esto, calcula que los dos grupos podrían condicionar su participación en el diálogo a que se aborde el mencionado asunto.

Lista de prioridades

Luis Nunes afirma que entre los temas prioritarios a conversarse en un eventual diálogo debe figurar obligatoriamente la lucha anticorrupción.

“No solo por el Caso Odebrecht, sino también por el caos que se ha generado en las gobernaciones regionales y otros ámbitos”, acota.

Del mismo modo, el analista estima que para otros temas de interés, como la seguridad ciudadana y la economía, el gobierno debe tener en cuenta campañas exitosas como #UnaSolaFuerza en pos de invitar a la oposición a trabajar conjuntamente.

Por su lado, Luis Benavente prevé que es necesario que el Ejecutivo se enfoque, en un eventual diálogo, en que se suscriba un acuerdo por la gobernabilidad.

“Sobre otros asuntos es más sencillo calcular que los grupos políticos podrían llegar a un norte. La plataforma de un acuerdo por la gobernabilidad podría facilitar que el gobierno de PPK pueda llevar a cabo las reformas que tiene en mente”, sentencia.

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