Los actos de violencia posteriores a las elecciones municipales y regionales del último domingo fueron perpetrados por algunos candidatos y organizaciones políticas que se niegan a aceptar resultados adversos, según sostuvo hoy el jefe de la Oficina Nacional de Procesos Electorales (ONPE), Mariano Cucho.
Tras indicar que la violencia es incompatible con el régimen democrático, lamentó que algunos postulantes y sus seguidores hayan promovido la quema de material electoral, ataques a locales de votación, a las oficinas descentralizadas de la ONPE y al personal de los organismos electorales.
Cuestionó que, ahora, estos sectores levanten irresponsablemente acusaciones de supuestas irregularidades para pretender forzar nuevas elecciones.
“La peor forma de violencia es la que pretende desconocer el resultado de la voluntad popular expresada en las urnas. Eso constituye un verdadero atentado contra la democracia, contra la voluntad popular, contra el voto de cada uno de nosotros”, declaró a la agencia Andina.
VIOLENCIA ES REPUDIABLE
Sostuvo que los actos de violencia referidos constituyen hechos tan repudiables, como los que cometía en el pasado la subversión para desconocer las elecciones.
Advirtió, además, que estos hechos se producen en un contexto sociopolítico muy complejo, donde el narcotráfico y el crimen organizado han ganado espacios.
Al ser consultado en Canal N respecto a que si el voto golondrino pudo haber influido en los resultados, Cucho dijo que “en alguna comunidad pequeña puede ser, pero no podría decir que efectivamente ha sido un hecho”.