El empresario chileno Gerardo Sepúlveda se presentó el viernes 26 de junio a la oficina del fiscal José Domingo Pérez, ubicada en la cuadra 2 del jirón Santa Rosa (Centro de Lima). El otrora socio del expresidente Pedro Pablo Kuczynski (PPK) fue interrogado, en calidad de testigo en el marco de la investigación al exmandatario Alejandro Toledo por la concesión de los tramos II y III de la IIRSA Sur, por casi 10 horas.
“Soy consultor de empresas y director de empresas y mi rol se centra en temas financieros y de estrategia, tanto para la obtención de financiamiento, operaciones de compra y venta de empresas y lineamientos de planes estratégicos. Actualmente, desarrollo esta actividad en Chile. En este tiempo que he pasado en el Perú he podido participar remotamente de algunos directorios y comités”. Así definió Sepúlveda sus actividades al inicio de la diligencia, que también contó con la participación de la procuradora Silvana Carrión.
La primera parte de la declaración del empresario chileno se centró en cómo conoció a Kuczynski a inicios de la década de 1990.
Detalló que la relación laboral con el ex jefe de Estado tuvo inicio en 1992, cuando el economista trabajaba en la Compañía de Aceros del Pacífico en Chile. “Él me invitó a trabajar con el grupo Nueva en Estados Unidos y ha sido mi mentor en mi desarrollo profesional. Tengo una relación de respeto y confianza profesional con el señor Pedro Pablo Kuczynski”, agregó.
Sin embargo, precisó que no participaron en eventos sociales recíprocos ni en otros de naturaleza social.
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Un año después, en 1993, Sepúlveda ingresa a trabajar en la firma Westfield Capital, de propiedad del exministro de Economía y Finanzas.
Durante la administración de Toledo (2001-2006) y mientras PPK ocupó los cargos de ministro de Economía y Finanzas y jefe de Gabinete Ministerial, Sepúlveda, utilizando la marca de la compañía de su “mentor”, logró cuatro contratos con la constructora brasileña Odebrecht.
“En mi rol de asesor financiero y en la época en que trabajé bajo la marca de Westfield Capital suscribí contratos de asesoría para la estructuración financiera de los proyectos Trasvase Olmos, IIRSA Norte e IIRSA Sur. En el caso de Trasvase Olmos el contrato fue tempranamente finiquitado y continúe desempeñando el mismo rol a través de mi empresa First Capital. En el caso del proyecto IIRSA Sur fue concluido a través de Westfield Capital y el contrato por IIRSA Norte fue tempranamente terminado por Odebrecht”, manifestó.
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Las consultas a Kuczynski
Uno de los contratos que Sepúlveda obtuvo, bajo el nombre de Westfield Capital, fue la estructuración financiera de los tramos II y III de la carretera Interoceánica o IIRSA Sur. Para ello, según relató, tuvo la colaboración de dos personas: la ciudadana estadounidense Denise Hernández, quien llevaba la contabilidad de la empresa; y del propio Kuczynski, cuando este había “cesado su rol como funcionario público”.
El empresario chileno explicó que el proyecto IIRSA Sur tuvo un “financiamiento innovador y de largo aliento”, porque a pesar de tener lista una estructura no se puedo completar con el inversionista original, que era el Banco Credit Suisse.
“Por lo cual hubo que rescatar dicho financiamiento en esta etapa y, con posterioridad a la salida del señor Pedro Pablo Kuczynski del gobierno del presidente Alejandro Toledo, recurrí a él para discutir algunas ideas sobre el financiamiento que me permitieran rescatar el financiamiento. Esto dado a su experiencia y conocimiento del mercado financiero, usándolo como consultor personal”, remarcó.
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Contradicción
Sepúlveda precisó que la estructuración del financiamiento para Odebrecht en la IIRSA Sur fue ejecutada “en un 100%” por él, pero con la “intervención” de PPK “en el segundo semestre de 2006”. Es decir, a pocos meses de que este dejará su cargo de jefe del Gabinete Ministerial por el terminó del gobierno toledista.
Esta parte de la declaración del empresario chileno contradice una de las primeras versiones que dio Kuczynski cuando la Comisión Lava Jato del Parlamento, dirigida por Rosa Bartra, reveló las asesorías que su empresa brindó a la firma brasileña.
Durante una entrevista en diciembre de 2017, el entonces presidente sostuvo que él no conoció de estos contratos de Sepúlveda.
“Recién he visto los contratos con Odebrecht, recién me entero de que había un contrato de ese tipo firmado por el señor Sepúlveda”, manifestó en aquel momento.
En comunicación con El Comercio, César Nakazaki, abogado de PPK, evitó realizar algún tipo de comentario sobre el testimonio del empresario chileno.
“Voy a consultar con mi cliente y con mis archivos, no tengo ninguna información sobre las IIRSA”, dijo.
Nakazaki, horas después, agregó, a través de su cuenta de Twitter, que “no existe contradicción”, porque en la declaración que ofreció PPK a fines de 2017 “no encontrarán el mismo rigor de información” que brindó “cómo investigado”.
El letrado sostuvo que el expresidente “cuando estuvo en el sector privado brindó consultoría” en la estructuración financiera que realizó Seppulveda “a Odebrecht” por medio de Wesfield Capital y First Capital.
Sepúlveda, además, confirmó que por la estructuración del financiamiento Westfield Capital recibió US$600.000, de los cuales él obtuvo un poco menos de la mitad.
“Este monto quedó en Westfield Capital [US$300.000] y no conozco el destino que se le dio. Un detalle importante es que los US$600.000 que recibe Westfield Capital en primera instancia son destinados a cubrir gastos que no han sido reembolsados por la concesionaria. Por ejemplo, cambio de pasajes, comidas, por eso la cifra que recibí es un monto inferior a US$300.000. Un montó equivalente se quedó en Westfield Capital”, subrayó.
También explicó que utilizó a Westfield Capital para realizar la consultoría sobre IIRSA Sur, a pesar de ya contar con su empresa First Capital, porque la primera era una “marca” que PPK y él “potenciábamos en el mundo de las finanzas corporativas” desde 1993. Agregó que nadie le pidió que utilice a la compañía del expresidente como vehículo.
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El interrogatorio a Sepúlveda concluyó a las 7 de la noche, tras 113 preguntas, formuladas en su mayoría por el fiscal Pérez y la procuradora Carrión.
Al día siguiente de esta declaración, el fiscal Pérez formalizó investigación preparatoria contra el empresario chileno por el presunto delito de colusión agravada en la modalidad de cómplice primario por el caso IIRSA Sur, pero en una carpeta distinta al proceso contra el expresidente Alejandro Toledo.
Percy García Cavero, abogado de Sepúlveda, cuestionó que su cliente haya sido incluido en la investigación preparatoria por las presuntas irregularidades en la concesión de los tramos II y III de la carretera Interoceánica Sur en la investigación a PPK y otros exministros, cuando “nunca fue citado” por ese punto en específico.
“En esta investigación, de la noche a la mañana lo hace imputado y le pide impedimento de salida de país. Si revisa el caso Westfield Capital [la otra investigación a Sepúlveda por presunto lavado de activos] se dará cuenta que no hay nada nuevo [en la carpeta de IIRSA Sur]. La fiscalía usa este nuevo caso como pretexto para que mi patrocinado continúe en el Perú desarraigado y en una situación de pandemia”, manifestó en comunicación con El Comercio.
García también rechazó la imputación hecha por el Ministerio Público a su cliente.
“El contrato de Westfield Capital con Odebrecht establecía un honorario, de obtener el financiamiento a través de bonos, de S/10′200.000, que se dividirían en partes iguales con el BCP. Con los CRPAOS, que se incluyen en las adendas N°3, ese honorario fue modificado a S/1′200.000, también a fraccionarse en partes iguales con el banco”, explicó.
“Entonces, si bajo la lógica del fiscal, Sepúlveda contribuyó a defraudar al Estado y consiguió el respaldo de Kuczynski a los CRPAOS, por qué iba a permitir que sus honorarios se los reduzcan de S/10′200.000 a S/1′200.000. No tiene sentido. El cambio de sistema perjudicó las ganancias previstas por Westfield Capital y de Sepúlveda, que fue el estructurador”, agregó.
Más información
La empresa Westfield Capital, de propiedad de PPK, “nunca funcionó en el Perú”, según declaró Sepúlveda. Añadió que él prestó servicios a Odebrecht cuando estaba radicado en los Estados Unidos.
El empresario chileno dijo que no conoce a Toledo “personalmente”. “He coincidido con él en la toma de mando del señor Pedro Pablo Kuczynski en el 2016, pero no tengo amistad ni relación personal ni profesional con el señor”.
Sobre Barata, Sepúlveda dijo que lo conoce desde el 2004, pero aclaró que su relación con el ex representante de Odebrecht en el Perú “fue exclusivamente profesional”.
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