Fernando Vivas

Hay 3 posibilidades: La excanciller Elizabeth Astete miente, lo que sería un demérito más a su foja de servicios empañada desde el 15 de febrero cuando nos enteramos de su renuncia por vacunarse irregularmente. O el presidente miente, lo que sería una sombra que acompañe a su atribulado gobierno de emergencia. O la verdad está a medio camino, en una formulación vaga de Astete sobre su deseo de vacunarse a la que el presidente no prestó o no quiso prestar atención. Le cuento lo que sé, para que usted elija una de las posibilidades.