Hace más de un año, el 15 de noviembre del 2022, la Sala Penal Especial de la Corte Suprema condenó a cuatro años y seis meses de prisión al excongresista Kenji Fujimori por la presunta compra de votos a fin de evitar la vacancia de Pedro Pablo Kuczynski (PPK) de la Presidencia de la República, en marzo de 2018.
La ejecución de pena de cárcel quedó suspendida hasta que sea firme (ratificada en segunda instancia). Justamente, este viernes, desde las 9 a.m. el Poder Judicial evaluará las apelaciones contra la sentencia. La sala encontró culpable a Kenji Fujimori del delito de tráfico de influencias agravado, pero no de cohecho activo genérico.
Mientras Fujimori busca anular la sentencia, el Ministerio Público pide que se eleven las condenas a seis años y medio de prisión efectiva.
Además de Kenji Fujimori, apelaron los otros sentenciados por el caso: los excongresistas Guillermo Bocángel y Bienvenido Ramírez.
Este caso se remonta al 2018, cuando el exparlamentario Moisés Mamani grabó las negociaciones que se realizaron para obtener votos en contra de la tercera moción de vacancia que se estaba tramitando contra el entonces presidente Pedro Pablo Kuczynski.
Desde el 31 de octubre de este año se programó la audiencia para evaluar las apelaciones planteadas desde el 2022.