Los ministros de Relaciones Exteriores y representantes diplomáticos de 17 países de América condenaron este martes “la ruptura del orden democrático” en Venezuela y desconocieron la reciente instalación de una Asamblea Constituyente, en una reunión en Lima.
En conferencia de prensa, el canciller peruano Ricardo Luna, quien dirigió la cumbre, afirmó que el régimen de Nicolás Maduro representa a “una dictadura” e indicó que los esfuerzos bien intencionados del Vaticano y de ex presidentes de la región como mediadores en la crisis venezolana, solamente fueron utilizados por el chavismo “para ganar tiempo”.
Luna, desde el Palacio de Torre Tagle, consideró que mientras no se revierta la creación de la Constituyente, Venezuela está en “una situación de facto, que es incompatible con los derechos humanos y con la democracia en la región”.
A continuación las claves de la cita en Lima:
1. No reconocerán la Constituyente de Maduro
La declaración de Lima-suscrita por 17 países de América- no solamente se solidarizó con la Asamblea Nacional, elegida democráticamente y cuya mayoría está en manos de la oposición venezolana, sino también fijó que no reconocerán los actos jurídicos aprobados por la Constituyente impuesta por la dictadura de Nicolás Maduro.
El secretario de Relaciones Exteriores de México, Luis Videgaray, afirmó que con esta acción “se está yendo más allá de las simples posturas discursivas”. Explicó que los gobiernos firmantes solamente reconocerán los contratos de obras públicas o el refinanciamiento de la deuda externa de Venezuela que hayan sido aprobadas por la Asamblea Nacional y no por la Constituyente.
2. ¿Se abrirá un corredor humanitario?
El canciller peruano Ricardo Luna precisó que durante la reunión no se avanzó “en términos específicos” respecto a si se abrirá un corredor humanitario para los venezolanos que deseen abandonar su país. Sin embargo, indicó que buscarán la ayuda del secretario general de las Naciones Unidas, António Guterres, para elaborar una propuesta, debido a que este tiene experiencia en asuntos de crisis humanitarias a nivel global.
A su turno, la ministra de Relaciones Exteriores colombiana, María Ángela Holguín, afirmó que Bogotá ha ampliado la estadía de los venezolanos que entren legalmente. “Normalmente, son 90 días, pero las personas que han excedido esa fecha pueden estar hasta dos años en Colombia, esto les permitirá trabajar legalmente y poder tener un seguro de salud”, refirió.
Agregó que con el gobierno brasileño están estudiando la posibilidad de establecer una visa humanitaria.
3. Acciones en la OEA
Los cancilleres reunidos en Lima, además, acordaron insistir en la aplicación de la Carta Democrática contra Venezuela en el seno de la Organización de Estados Americanos (OEA).
El ministro de Relaciones Exteriores chileno, Heraldo Muñoz, sostuvo que si bien, en junio de este año, no se obtuvieron los votos para que la OEA aplique la Carta Democrática a la dictadura de Maduro, la creación de una Asamblea Constituyente ha cambiado las circunstancias y eso puede significar que otros países se sumen al acuerdo de Lima.
“Hay un esfuerzo para la continuación de la aplicación de la Carta Democrática, eso depende de las circunstancias, son cambiantes, hay una situación de una Constituyente que no existía hace un mes atrás y eso puede significar que haya países hoy día que estén disponibles para la plena aplicación de la Carta Democrática”, explicó.
Previamente, Luna aseguró que las acciones ante la OEA se ejecutarán “cuando sea el momento oportuno y cuando tengan la votación suficiente” para sancionar al régimen de Maduro.
4. ¿Se expulsará a embajador chavista?
Al ser consultado sobre la situación del embajador de Venezuela en Lima, Diego Molero, el canciller Luna sostuvo que las medidas del gobierno del Perú sobre el ex ministro chavista “están en evaluación”. Añadió que cualquier medida que tome el Ejecutivo sobre su relación con Caracas “no será improvisada”.
Desde el Congreso, su presidente, el fujimorista Luis Galarreta, solicitó la expulsión de Molero.
5. “Es una crisis regional”
El canciller peruano Ricardo Luna también aseguró que la crisis en Caracas “no es un problema bilateral entre Chile y Venezuela, entre Colombia y Venezuela, entre Brasil y Venezuela o entre el Perú y Venezuela, esta es una crisis regional sin precedentes, de difícil manejo”.
Luna refirió que no existe una “determinada condición” que provoque un futuro rompimiento de relaciones con el régimen de Maduro. “[Eso] va a depender del enfoque que tenga cada país, si los países que tengan una misma percepción coinciden en actuar de manera paralela o complementaria, no lo comunicaremos y lo haremos”, acotó.
6. Violación a los DD.HH.
En el acuerdo de Lima, los cancilleres mostraron también "su condena a la violencia sistemática a los derechos humanos y las libertades fundamentales, a la violencia, la represión y la persecución política, a la existencia de presos política y la falta de elecciones libres".
Lee aquí la declaración de Lima sobre la crisis en Venezuela.
