Redacción EC

Parte del norte peruano ya vive un ambiente festivo por la celebración en honor al Señor Cautivo de Ayabaca. La sagrada imagen del Nazareno es visitada anualmente como parte del ritual realizado por miles de peregrinos en una de las más importantes expresiones de piedad popular con mayor arraigo de la sierra piurana, y que data de hace más de 250 años. A propósito de esta nacional, conoce su historia, desde cuándo es homenajeado, y más detalles acerca del patronazgo que posee.

DESDE CUÁNDO SE CELEBRA LA FIESTA DEL SEÑOR CAUTIVO DE AYABACA EN PIURA

Más de 150 mil peregrinos, devotos y turistas siguen llegando a Piura desde Tacna, Arequipa, Ica, Lima, de todo el norte del Perú, e inclusive desde países como Ecuador y Chile, entre otros, para venerar la imagen del Señor Cautivo de Ayabaca que representa el momento en que Jesús fue abandonado por sus discípulos, tras ser capturado en el huerto de Getsemaní.

(Foto: Arzobispado de Piura)
(Foto: Arzobispado de Piura)

De acuerdo a información compartida por el de la ciudad, la festividad que honorifica al Cristo Nazareno y le rinde tributo al Jesús con túnica morada de pie, maniatado con un cíngulo que refleja en su rostro profunda desolación, empezó a celebrarse tradicionalmente hace más de 250 años luego de que un cura nacido en España ideara la forma como quería que el pueblo de la serranía norteña venerara al Todopoderoso.

HISTORIA DEL SEÑOR CAUTIVO DE AYABACA EN PIURA

La historia más difundida sobre el origen del Señor Cautivo de Ayabaca cuenta que en 1751 el sacerdote español apellidado García Guerrero, quiso entregarle a su pueblo y congregación de fieles, una imagen de Jesucristo.

Para llevar a cabo esta iniciativa, eligió un tronco de un árbol de cedro del cual habría brotado sangre luego que un labrador le diera un hachazo, y luego de ser encontrado en el cerro Sahumerio de la zona de Jililí, la provincia recibió la visita de 3 jinetes vestidos con impecables ponchos blancos de lana que llegaron montados en caballos albinos.

Tras su arribo en la ciudad, el trío se presentó como artistas talladores e inmediatamente se comprometieron a esculpir la estatua de cedro con la condición de que el pueblo guardara absoluta reserva sobre su presencia, y además nadie los interrumpa durante sus labores ni que los vean trabajar sobre la imagen.

Transcurrido el tiempo, la curiosidad de los pobladores de Ayabaca pudo más que su paciencia, y tras insistir creyendo que habían sido burlados o estafados, forzaron la puerta del lugar donde se encontraban los jinetes, dándose con la sorpresa que el taller estaba vacío e incluso la comida permanecía intacta.

Profundamente decepcionados buscaron por todo el recinto y de pronto ante ellos vieron de manera imponente y majestuosa a la escultura de un Cristo Nazareno con las manos cruzadas que medía 1 metro 80.

Según los pobladores de Ayabaca, los autores fueron ángeles vestidos de chalanes enviados por Dios, que al concluir la escultura alzaron vuelo y se perdieron, llamándolo como una “obra de ángeles”, y desde aquel entonces, erigiéndose como una historia de fe y devoción que se acrecentó hasta que en 1904 el Reverendo Padre Tomás Eliseo Velásquez, inauguró el templo donde se sitúa actualmente la imagen del Señor Cautivo venerado anualmente cada 13 de octubre.

¿POR QUÉ Y DESDE CUÁNDO EL SEÑOR CAUTIVO DE AYABACA FUE DECLARADO COMO SANTO PATRONO DE PIURA?

Reconocida por su importancia, trascendencia nacional y promovida para su preservación y sostenibilidad en el tiempo, la fiesta del Señor Cautivo de Ayabaca forma parte de la historia cultural del Perú gracias a condecoraciones y reconocimientos por parte del Gobierno.

Desde el 01 de octubre de 2013, las festividades en honor al Cristo Nazareno piurano figuran declaradas como Patrimonio Cultural de la Nación según resolución viceministerial N° 063 establecida por el Ministerio de Cultura, y en esa misma línea 9 años más tarde, se convertiría en el santo patrono de la religiosidad y del costumbrismo espiritual y cultural en el norte del Perú gracias a la promulgación de una ley por parte del Congreso de la República.