Mindhunter, segunda temporada: la historia de los criminales que aparecen en la serie de Netflix

¿Qué lleva a una persona a convertirse en un peligro para la sociedad? ¿Influye la crianza? ¿En sus genes está esa incontrolable violencia? ¿Algún evento traumático desencadena tal letal mentalidad? Esas son algunas de las preguntas que se intentan responder en la segunda entrega de Mindhunter, el thriller psicológico de Netflix.

Para quienes aún no la han visto: la serie ambientada en los años 70 tiene como protagonistas a Holden Ford (Jonathan Groff) y al veterano Bill Tench (Holt McCallany), dos agentes del FBI que, con la guía de la psicóloga Wendy Carr (Anna Torv), se dedican a entrevistar a asesinos seriales para desarrollar perfiles que permitan al FBI poder anticipar y enfrentar a este tipo de criminales.

Si bien los personajes son ficticios, los casos que investigan son reales. De hecho, la carta más fuerte de esta temporada es la –ansiada- entrevista a Charles Manson. Aquí la historia detrás de los criminales que aparecen en la serie original de Netflix.

-ASESINO BTK-
En la primera temporada de Mindhunter aparecieron breves secuencias de este criminal. En esta nueva entrega, se conoce su historia. Su nombre es Dennis Rader, más conocido como el asesino BTK por el acrónimo de bind, torture and kill (atar, torturar y asesinar). El sujeto enviaba cartas a los medios para describir sus crímenes, burlarse de la policía y retar a que lo atraparan. Entre 1974 y 1991, mató a 10 personas.

En 2004 se hizo el último intento para dar con su paradero. Al enterarse, Rader retó a la policía enviando un CD. El equipo de investigación analizó los metadatos del archivo de Word que contenía. Se percataron de que el sujeto que escribía se llamaba ‘Dennis’ y que tenía conexión con una iglesia luterana de Wichita, Kansas.
El sujeto, de hoy 74 años, fue declarado culpable y condenado a 10 cadenas perpetuas. En la serie es interpretado por Sonny Valicenti.

-EL HIJO DE SAM-
Este es otro asesino entrevistado por los investigadores del FBI. En la vida real, el cartero David Berkowitz, de entonces 24 años, mató a seis personas e hirió a otras siete en ocho tiroteos en Nueva York entre 1976 y 1977. El arma que usaba era un revólver Chartes Arms Bulldog y fue apodado como el ‘asesino del calibre 44’. Sin embargo, se llamaba a sí mismo como ‘El Hijo de Sam’.

Las mujeres afroamericanas fueron sus primeras víctimas, lo que hizo pensar a los investigadores que podría tratarse de un psicópata que quería vengarse de algún desaire amoroso en féminas de aspecto similar. Sin embargo, en el juicio aseguró que un demonio había poseído al perro de si vecino y le ordenó cometer los asesinatos. Hoy tiene 66 años y cumple seis cadenas perpetuas. En la serie es interpretado por Oliver Cooper.

-CHARLES MANSON-
El personaje más potente de la temporada. Era uno de los asesinos más pedidos por el FBI para entrevistarlo. La razón: fue el único que no asesinó con sus propias manos. ¿Cómo un hombre de 1.57 m convence a jóvenes para cometer horripilantes masacres y no mostrar arrepentimiento? Charles Manson es, para muchos, el maestro de la manipulación.

Manson interpretó que Helter Skelter, de The Beatles, hablaba de una hipotética guerra racial entre negros y blancos que, según él, se avecinaba. A finales de los 60, conformó la llamada ‘Familia Manson’, una especie de secta responsable de algunos de los asesinatos más sangrientos de la segunda mitad del siglo XX. En uno de los crímenes, Helter Skelter apareció escrito con sangre de la víctima en una escena.

En 1971 fue declarado culpable de conspiración en el asesinato de siete personas, entre ellas la actriz Sharon Tate, esposa del director Roman Polanski. En la serie es interpretado por Damon Herriman, que también personificó al criminal en la película Once Upon a Time in Hollywood(2019), de Quentin Tarantino.

-LOS NIÑOS DE ATLANTA-
Este es el caso central de la temporada. Era 1979 y la ciudad ubicada en Georgia daba miras al desarrollo. De pronto, niños afroamericanos desaparecían y, semanas después, encontraban sus cadáveres. Dos adultos también fueron brutalmente asesinados. En total fueron 28 víctimas.

(ADVERTENCIA: EL SIGUIENTE PÁRRAFO INCLUYE SPOILERS)
En mayo de 1981, un joven de 23 años fue detenido como el principal sospechoso. Wayne Williams fue condenado a dos cadenas perpetuas por el asesinato de los dos adultos. Sin embargo, hasta el momento no se ha podido probar que Williams fue culpable de la muerte de los niños. Desde la prisión estatal de Telfair, el criminal niega haber lastimado a los menores. Christopher Livingston da vida este macabro personaje en Mindhunter.