Lolo y Manguera en los 30. Terry en los 50. Chale, Chumpi y Cubillas en los 70. Uribe, Cueto y Velásquez luego. ¿Es posible elegir un solo jugador que resuma lo que creemos sobre el fútbol peruano? ¿Uno solo? El debate está abierto.
Para el escritor José Carlos Yrigoyen, que acaba de publicar "Con todo, Contra Todos" (Penguin Random House) tiene una opinión sobre el tema, amparada quizá en su dimensión macro, geográfica.
¿Quién es el futbolista más influyente de la historia del fútbol peruano?
Está Teófilo, sin duda. Chumpitaz. Pero si hay un nombre al que le debemos gratitud es César Cueto. Voy a decir algo que es notable: él le enseñó a dos países a jugar al fútbol, repartió su talento en dos naciones. A una la rescató de la mediocridad, de la violencia, para volverla hoy una de las selecciones top en el mundo. Y con la nuestra, solo hizo historia. No creo que se pueda decir nada igual de nadie en el Perú. Ver sus chispazos en una cancha, hoy a los sesentaitantos, es la certeza de que alguna vez fuimos mejores.
César Cueto jugó dos Mundiales con Perú (1978 y 1982), militó en Alianza, Gálvez, Muni y Cristal en Perú, Nacional, América, Pereira y Cúcuta en Colombia donde no fue un simple jugador de fútbol. Los estadios se volvían salones de clases "porque yo iba a aprender de él", dijo una vez el Pibe Valderrama. Su valor es ese, su influencia radica allí.
Vota aquí: