La única elefanta que trabaja en la capital de Camboya, Phnom Penh, fue bendecida por monjes antes de oficializarse su retiro.
Con 30 años de servicio transportando turistas, Sambo, de 54 años, ha sido una atracción regular en el templo de Wat Phnom desde 1980.
Sin embargo, desde 2012 dejó de trabajar debido a una infección en una pata y protestas de funcionarios quienes señalaban que el paquidermo causaba congestión de tráfico. En Camboya hay 78 elefantes domesticados y 400 salvajes, indican ambientalistas.
Los elefantes asiáticos están clasificados como especie en peligro por la Unión Internacional para la Conservación de la Naturaleza.
La elefanta dejará las congestionadas calles de la capital camboyana por un lugar de ecoturismo en una zona forestal protegida en el noreste del país.
Sus entrenadores señalaron que podrá jubilarse gracias a donaciones internacionales, agregando que podrá desplazarse libremente junto a otros nueve elefantes.