El Gobierno brasileño anunció que distribuirá gratuitamente entre grupos considerados como de riesgo una medicina que reduce la posibilidad de la infección por VIH, el virus que causa el Síndrome de Inmunodeficiencia Adquirida (sida).
La distribución de una medicina que impide que el VIH se multiplique en el organismo humano será la nueva estrategia de combate al sida de Brasil, país que ha sido considerado modelo por la ONU por sus políticas de distribución gratuita de preservativos y de las medicinas para el tratamiento de la enfermedad.
La nueva política sobre el VIH fue anunciada este miércoles en la sede de la Organización Mundial de la Salud (OMS) en Ginebra por el ministro brasileño de Salud, Ricardo Barros, según un comunicado divulgado en Brasil por su cartera.
La medicina será distribuida en los puestos públicos de salud a personas consideradas integrantes de grupos de riesgo, como profesionales del sector salud, homosexuales, hombres que tienen relaciones sexuales con otros hombres y parejas en que uno de sus integrantes es portador del VIH.
El medicamento escogido es el Truvada, un compuesto con dos principios usados en tratamientos para personas con sida (Emtricitabine y Tenofovir), que no es considerado como una cura para la enfermedad pese a que la OMS la recomienda en programas de prevención, por reducir el riesgo a la infección por VIH.
Según la directora del Departamento de Infecciones Sexualmente Transmisibles del Ministerio de Salud, Adele Benzaken, las evidencias científicas disponibles permiten decir que la medicina reduce el riesgo de infección en más del 90 % de los casos.
La nueva estrategia prevé el uso diario de la medicina por parte de personas que no son portadores del virus pero que corren el riesgo de contraerlo.
El Ministerio de Salud informó de que invirtió unos 1,9 millones de dólares en la adquisición de 2,5 millones de comprimidos de la medicina, cantidad que considera suficiente para atender la demanda en el primer año del programa.
La medicina comenzará a ser distribuida en aproximadamente seis meses entre cerca de 7.000 personas que, según el Gobierno, estarían entre los grupos de riesgo prioritarios.
Los especialistas recomiendan que las personas con riesgo de contraer sida, además de consumir la nueva medicina, mantengan las prácticas preventivas tradicionales como el uso de preservativos en las relaciones sexuales y la realización de exámenes médicos periódicamente.
Según el Ministerio, la distribución de la medicina convierte a Brasil en el primer país de América Latina y en uno de los primeros del mundo en adoptar una estrategia de prevención del sida con medicinas como política pública de salud.
De acuerdo con el último boletín epidemiológico del Ministerio de Salud, cerca de 827.000 personas son portadoras del virus del sida en Brasil, de las que unas 372.000 ya reciben el tratamiento gratuito, unas 260.000 saben que están infectadas pero no han iniciado tratamiento y unas 112.000 desconocen que son portadoras.
Pese a que la transmisión de la enfermedad se considera como estabilizada en Brasil, uno de los países más castigados por el sida, el número de nuevos casos por año es de cerca de 40.000.
Fuente: EFE