RUDY JORDÁN ESPEJO
En un privado salón de la iglesia Nuestra Señora del Carmen, familiares y amigos despidieron los restos de Rafael Santa Cruz, uno de los más grandes investigadores y exponentes del cajón peruano y de la música afroperuana.
“Es muy seguido lo que está sucediendo, con la pérdida de grandes amigos y artistas”, apuntó la cantante criolla Bartola al bajar de un taxi, con unos lentes oscuros, un paso desorientado y una voz delgada y triste, muy alejada de su portentoso timbre habitual.
Para ella, Rafael ha continuado el legado cultural que la familia Santa Cruz le ha dado a la música peruana con exponentes como Nicomedes. “Con su estudio sobre el cajón él ha seguido el legado que sus ancestros le han dejado”, señaló.
Pero no solo músicos mostraron su tristeza. Actores como Paul Vega y Ebelin Ortiz dieron sus condolencias a los familiares del artista fallecido esta madrugada de un paro cardíaco.
En el local no dejaban de estacionarse movilidades cuyos choferes descendían con arreglos florales. Ya el del músico Gian Marco, ya el del defensor del Pueblo Eduardo Vega, ya de la peña Don Porfirio. La lista de personas dolidas con su ausencia parece interminable, interminable como una jarana criolla donde él y su cajón siempre vivirán.