Yalitza Aparicio era maestra de escuela y seguía estudiando para ser educadora, cuando fue convocada para dar vida a Cleo en "Roma", cinta dirigida por Alfonso Cuarón en 2018.
La revista Time ubicó el trabajo de Yalitza en "Roma" como la mejor actuación de 2018, y en esta publicación figuran artistas de la talla de Lady Gaga, Melissa McCarthy y Rami Malek, consideradas las diez mejores actuaciones de ese año.
Aparicio es parte medular de "Roma", incluso el propio Alfonso Cuarón ha dicho en sus discursos de agradecimiento que "Roma" es lo que es en parte gracias a las actuaciones de Yalitza Aparicio, Nancy García y Marina de Tavira.
"Roma" es una historia inspirada en la vida de Cuarón, en mujeres que marcaron su infancia: Cleo, la doméstica de origen indígena que queda embarazada tras sus primeras experiencias sexuales, interpretada por Aparicio; y la señora de la casa, su madre, interpretada por la actriz Marina de Tavira, a la que el esposo deja por otra mujer.
INFANCIA DURA
Yalitza Aparicio, originaria de la Heroica Ciudad de Tlaxiaco, Oaxaca, tuvo una infancia difícil, marcada por la necesidad y la falta de oportunidades.
Su madre la crió sola, trabajó como doméstica y eso le ayudó a entender el contexto de esta relación de amor y desamor entre criados y patrones.
"Hubo escenas durante el rodaje que removieron mis recuerdos y fue surgiendo, sola, esa necesidad de mi personaje de querer proteger a los niños con respecto a lo que estaba pasando para que ellos no sufrieran", conto Yalitza sobre cómo construyó a Cleo.
La actriz mexicana también se reunió con la ahora ex doméstica de Cuarón. "Me contó solamente cómo llegó a la casa, cuál era la relación con la familia, pero se quedó hasta ese punto.
"Después de vivir toda esta aventura me di cuenta que el cine no es algo lejano a lo que yo siempre he soñado, mediante películas también se puede educar a la gente de una forma más masiva, pero pues veremos si se presenta alguna propuesta", dijo con humildad la actriz sobre su futuro.
Por ahora, seguirá viviendo este momento de su vida, que no solo incluye aplausos sino también los insultos racistas y clasistas de algunos compatriotas tras aparecer vistiendo ropa de diseñador en la revista Vanity Fair.