camisa blanca
camisa blanca

La camisa blanca se usó por primera vez en el siglo 1.500 a.c, como prenda interior. Por estos días, es un básico del armario femenino, incluso en verano. Como sus principales beneficios: ilumina el rostro y aporta elegancia a la tenida. 

Si lleva mangas XL favorece a un cuerpo en forma de triángulo invertido (espalda ancha, caderas estrechas), porque agrega volumen en la parte baja. "Y si quieres un estilo folk, opta por llevar una camisa blanca con bordados", comenta Faviola Palomino, experta en imagen personal y moda. En esta guía, ¡inspírate!

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