Uruguay, Eme de Mujer, El País/ GDA/ El Comercio
Todas tenemos una prenda que amamos, pero el tiempo no tiene misericordia y aquel artículo glorioso se llega a deteriorar. Generalmente la tiraríamos o la donaríamos; sin embargo, no tenemos “fuerza” para hacérselo a esa pieza en específico. En tus manos está evitar que esta historia de amor termine en tragedia.
No todo está perdido. Dile a mamá que aunque siga inisitiendo esa blusa o esas zapatillas seguirán ocupando su lugar en tu clóset. Aquí algunos trucos sencillos para preservar tu ropa vieja y conservarla por más tiempo en condiciones (al menos) aceptables.