Lorena Salmón: "Los tres mosqueteros"

Este 23 de marzo se adelanta la Semana de la Moda de Lima con una lista de participantes que llamó mi atención. Todos los escogidos son votados por miembros del comité encargado de la selección. Yo formo parte de dicho comité, pero si me preguntan por quiénes votaron mis compañeros, juro que no tengo idea. Algunos de los diseñadores por los que yo voté no participarán; así que me gustaría hablarles de uno de ellos y de otro par que me ha sorprendido gratamente.

Ha sido un gusto descubrir que la moda masculina local tiene futuro.

Uno de los que no participarán en este Lifweek, pero que todos merecen conocer es Ladrón de Guevara. No había oído hablar de esta marca hasta que encontré el nombre del diseñador entre los candidatos a participar en una nueva sección del Lifweek que se ha abierto a causa de la gran expectativa que generan los nuevos talentos.

Diego Ladrón de Guevara es un diseñador peruano que vive en Argentina. La suya es una marca completamente gráfica y son los estampados -que el artista trabaja personalmente-, su gran valor agregado. Su estética es limpia y pura y el uso de los colores muy libre. Para mí es una marca con gran proyección. Eso sí, me parece que podría pecar aun de propuestas demasiado atrevidas en sus fits y siluetas (túnicas para hombres con prints geométricos) para los chicos de esta ciudad. Pero estamos en el mes del amor, y la romántica en mí quiere pensar que ya hay demanda para una propuesta así de avant garde.

Por otro lado, y felizmente presente en la próxima edición del Lifweek, me encontré con José Clemente. La primera vez que lo vi en vivo fue en el marco de Perú Moda el año pasado y me quedé bastante contenta con lo que vi: una propuesta masculina que si bien tiene su epicentro en lo formal, tiene giros divertidos e interesantes para cualquier limeño. De hecho, considero que es precisamente a lo que deberían de apuntar los hombres que aquí buscan un estilo personal: elegir una marca local como esta de buena calidad, que funciona perfectamente para su día a día en la oficina y fuera de ella.

El tercero de los diseñadores que quiero destacar hoy es Omar Valladolid. Lo suyo es una onda agresiva, monocromática, poderosa y que sin duda va a poner la nota de equilibrio entre las propuestas femeninas. De hecho, la elección me parece interesante porque Clemente y Valladolid se ubican en polos completamente diferentes. Esta diversidad demuestra que cada vez hay más alternativas de vestir para ellos en Lima.

Como dirían mis hijos: “ye, ye, salchichas con puré”. Al parecer la moda masculina comienza a hacerse camino.