¡Moqueguazo!
Y cuando Alianza gana de esta manera es lo más natural perder la cabeza y la perspectiva para arrojarse en los brazos de la ilusión. Yo también. Y alucino. Y quiero. Y tengo fe. El ‘Moqueguazo’ nos lleva a eso. Cinco goles y el baile es una clarinada de lo que probablemente suceda a fin de año. Lo que tendría que suceder. Se dio una situación explícita para que Alianza esté más cerca del triunfo ante Cobresol. La expulsión del defensa Sergio Ubillús (merecida por trabar por detrás –siendo último hombre- a Ovelar cuando se iba directo al gol) hizo que el equipo local vea insoportable el asedio blanquiazul que había podido controlar en los primeros minutos.
Jugar con 10 ante Alianza es lo peor que le puede pasar a un equipo en este campeonato. Y si Montaño está enchufado, los goles llegan por decantación. Apareció también la velocidad de Bazán y Hurtado y las potencia y buena estrella de Ovelar para que el resultado sea tan contundente.
Atrás Solís y Fleitas no sufrieron ningún apuro y Forsyth estuvo tranquilo en su arco viendo como el partido se resolvía lejos de su territorio. Ahora le toca ser titular y parece haber quedado atrás la polémica sobre el retorno al arco de Libman. Me opondría al cambio en este momento del mismo modo como sucedió con Salomón hace meses y no es por tomar partido, sino que la decisión no debería verse apurada por situaciones extrafutbolísticas. Fue criticable la forma como salió Yuyo, pero ahora tampoco correspondería que saquen a George.
ENTRE COSTAS Y ARRUÉ
Hace unos post mencioné que este equipo camina en piloto automático. Que Costas había dejado un engranaje y que el gran temor era que Arrué desbarate lo avanzado. No puedo ahora afirmar que Arrué es el gran técnico que necesitábamos para salir campeones, sería incongruente. Pero Arrué ha sido inteligente y suple sus carencias como entrenador asumiendo un papel paternalista para los jugadores jóvenes y siendo un hombre de confianza para los más experimentados. A pesar de que al equipo se le debe sueldos, Arrué ha logrado que eso no los perturbe y en ello radica el buen andar de Alianza. No es una lumbrera como estratega, hace lo justo, pero tiene muñeca para que el grupo humano le responda positivamente con su apariencia y mensaje de hombre de buena fe. ¿Alcanzará con eso? Pregunto.
¿El Alianza de Arrué es mejor que el Costas? Es una valoración que todavía no se puede hacer. A Costas se le criticó por perder los campeonatos en los partidos de definición que planteó mal. Arrué todavía no afronta ningún partido de esas características (tendrá dos en breve: la U en Ate y Aurich después). Si supera esos escollos en buena forma el equipo vivirá la panacea y será casi improbable que alguien lo detenga en su camino al título.
Arrué cuenta con un Roberto Ovelar en su mejor forma física y mental, alejado de tristezas y problemas. Y cuando el paraguayo está bien, definitivamente marca diferencias en el medio. Costas lo tuvo lesionado siempre.
Arrué tiene a Johnnier Montaño en un momento interesante de su carrera y por lo que se aprecia ya no es un amarrabola como en años anteriores. Además, este Alianza no parece ser un equipo que vaya a caer en la ‘Montañodependencia’ por contar con jugadores que sintonizan con otro tipo de juego. El colombiano ha entrado en un sistema ya establecido y no al revés. Eso sumado a su gran talento da como resultado un equipo que gusta y golea.
Mientras tanto yo no me desvío de lo que planteé semanas atrás sobre Miguel Ángel Arrué. Me emocionaré si es que llega el campeonato porque es lo que corresponde. Solo que si quisiera mirar más allá e ilusionarme con la Copa Libertadores, no vería pruebas firmes de estar en manos verdaderamente competitivas para afrontar una lucha internacional que exige métodos de trabajo, planificación, conocimiento del torneo, rivales y una preparación muy superior.
¿Veremos qué les parece a ustedes amigos grones?
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[Una actuación soberbia del equipo. La tarea es ahora sostener el nivel y demostrarlo ante rivales de mayor fuste] Fuente CMD.