El tratamiento con oxígeno hiperbárico de Hugo Chávez
El presidente venezolano Hugo Chávez ha viajado a Cuba para recibir un tratamiento con una cámara hiperbárica de oxígeno en ese país. ¿En que consiste ese tratamiento y para que sirve?
De entrada, debemos decir que ese tratamiento no sirve para tratar el cáncer… no vaya a ser que, dada la publicidad que esta noticia va a recibir, a algún vivo comerciante se le ocurra empezar a anunciar y lucrar asegurando de que el oxígeno hiperbárico sirve para tratar algún tipo de cáncer. Eso no es cierto.
En cancerología, el oxígeno hiperbárico se usa para tratar dos complicaciones producidas por la radioterapia (una de las modalidades en el tratamiento del cáncer), una es una lesión en el hueso llamada osteonecrosis y la otra en la piel, llamada dermatitis por radiación.
La radioterapia cura el cáncer pero puede tener efectos secundarios…
Durante la radioterapia, una máquina (las antiguas pero aún fieles y útiles bombas de cobalto o los modernos aceleradores lineales) libera poderosa radiación electromagnética sobre los tejidos cancerosos.
Lamentablemente, no solo se irradian los tejidos cancerosos, los que son eliminados por la radiación, sino que la radiación también afecta los tejidos sanos localizados alrededor del tumor. Esa radiación del tejido sano hace que sus pequeñas venas y arterias se inflamen primero y mueran después, con lo que el tejido queda sin riego sanguíneo y sufra lo que en el lenguaje popular se llama “mala circulación” que en casos más severos puede provocar que el tejido irradiado muera por falta de riego sanguíneo.
Cuando esa muerte de tejido se produce en el hueso irradiado, la complicación recibe el nombre de osteonecrosis (osteo significa hueso, necrosis significa muerte celular). Cuando el problema se produce en la piel, esa falta de circulación puede producir úlceras o heridas profundas, parecidas a las úlceras o heridas que se producen en los diabéticos y en las personas que sufren de várices.
El gran problema para el paciente es que esas necrosis son muy difíciles de curar porque los tejidos se han quedado sin sangre, es decir, sin oxígeno. Debemos recordar que en el proceso de curación de una herida, la presencia de sangre fresca con alimentos y oxígeno es fundamental.
¿No sería bueno que exista un método que logre hacer que el oxígeno entre a gran presión a los tejidos que no tienen buena circulación?
Es ahí en donde entra este asunto de las cámaras hiperbáricas de oxígeno.
Eso es lo que hace una cámara hiperbárica de oxigeno. Híper significa algo grande, algo fuerte, baros significa presión (de ahí viene la palabra barómetro o medidor de la presión atmosférica).
La cámara hiperbárica es entonces un aparato parecido a una cápsula (aunque existen modelos más grandes para varias personas) en el cual el paciente recibe oxígeno a una presión 2 a 3 veces mayor que la que se encuentra en el aire que respiramos. Esa mayor presión del oxígeno hace que este vital elemento gaseoso entre en mayor cantidad por los pulmones, difunda más rápidamente por los tejidos y logre penetrar a lugares que no tienen buena circulación de sangre.
El paciente permanece dentro de la cámara hiperbárica alrededor de una hora y el tratamiento se repite de lunes a viernes durante 4 a 6 semanas.
Existen entonces una serie de indicaciones para el uso de las cámaras hiperbáricas, todas esas enfermedades tienen en común una mala circulación de sangre y por tanto una relativa carencia de oxígeno.
De acuerdo al Comité de Tratamiento con Oxígeno Hiperbárico de la Sociedad Norteamericana de Medicina Hiperbárica y de Profundidades Marinas, las siguientes son las indicaciones más comunes del uso de oxígeno hiperbárico:
- Enfermedad de descompresión de los buzos: ocurre cuando los buzos suben muy rápido a la superficie y se forman burbujas de nitrógeno en su sangre.
- Embolismo gaseoso arterial, cuando por accidente se inyecta aire en la sangre.
- Envenenamiento por monóxido de carbono. En esta condición, los glóbulos rojos ya no quieren llevar oxigeno porque el monóxido de carbono lo saca de su sitio.
- Gangrena gaseosa. Esta es una grave infección producida por un microbio que odia al oxígeno.
- Heridas que tardan en curar.
- Abscesos del cerebro. Estas son colecciones de pus en el cerebro.
- Osteomielitis o infecciones crónicas de los huesos.
- Bloqueos de la arteria de la retina.
Como repetimos, no se ha probado que las cámaras hiperbáricas sirvan para tratar el cáncer mismo, su único uso estudiado y recomendado en cancerología es para tratar las complicaciones producidas por la radioterapia en los tejidos sanos.
El tratamiento con oxígeno hiperbárico puede provocar algunas complicaciones. Debido a la mayor presión del oxigeno en la cámara hiperbárica pueden producirse lesiones en los delicados tejidos pulmonares. Se calcula además que el 10% de los pacientes pueden “intoxicarse” con el oxígeno y presentar convulsiones, severos dolores de cabeza, y daño pulmonar.
Según las declaraciones de hugo Chávez, el oxígeno hiperbárico continuará con el proceso de recuperación del cáncer que padece, pero lo cierto es que el presidente venezolano recibirá ese tratamiento para tratar alguna complicación producida por la radioterapia recibida en Cuba a principios de este año. De repente tiene úlceras, heridas en la piel o segmentos de hueso necrosados (muertos) o en vías de necrosarse.
Recordemos que durante todo este tiempo nunca se ha visto o escuchado a un médico autorizado informando sobre la salud del señor Chávez. Todo lo que se sabe de su enfermedad (incluido este reporte de la cámara hiperbárica de oxígeno) ha sido siempre reportado por él mismo.
Su enfermedad sigue siendo un misterio.