El cerebro no te ayuda a ser buen líder
Para ser un buen líder hay que centrarse en las metas, pero sin dejar de prestar atención a las personas.
El problema es que nuestro cerebro está más diseñado para perseguir las metas.
Para ser un buen líder hay que centrarse en las metas, pero sin dejar de prestar atención a las personas.
El problema es que nuestro cerebro está más diseñado para perseguir las metas.
