El triunfo más caliente de los ‘Sex Pacers’
Basta con observar como Lance Stephenson le soplaba la oreja a LeBron James para saber que no se trataba de una final, sino de una guerra. Fue una batalla que pudo terminar con desangrar la herida de los Indiana Pacers o que podría alargar, como lo fue, la rivalidad entre ambos hasta un sexto o séptimo duelo en estas finales de Conferencia Este. En un partido donde cada superestrella respondía con sendos triples en los minutos finales, fue la astucia y defensa de Stephenson, y la conducción de Paul George –involucrado en una traición con la prometida de su amigo Roy Hibbert- la que terminó por hacer que los Pacers se impongan (93-90) en este quinto juego en Indianápolis. Todo el mundo pensaba que el Heat la tendría fácil, que LeBron brillaría con más de 30 puntos, y que Bosh sería clave con los tiros de distancia, como en el último juego, pero muchos se olvidaron que estos Pacers, tan irregulares como siempre, podían ejercer esa condición de local por la que habían luchado en esta temporada regular. Y terminó siendo así. Si en el segundo cuarto, parecía ser su sentencia de muerte, aquí, como en los últimos post, señalaremos las razones del triunfo del cuadro Frank Vogel sobre el Heat.
LA CERCANÍA SOBRE LEBRON
Ya le tocaba que ir al banco en el sexto minuto del segundo periodo por su tercera falta y en el quinto del tercer cuarto por la quinta. No fue el partido de LeBron, puesto que el alero del Heat fue totalmente estudiado por los Pacers. No solo la defensa del enemigo fue letal con él, sino también el ataque. James solo marcó siete puntos y cuatro asistencias en 24 minutos que estuvo en cancha. El excesivo uso de la fuerza, su falta de tacto y las actitudes de Stephenson terminaron por enloquecer a la estrella del Heat. Definitivamente el equipo sintió su baja, sobre todo en el tercer periodo donde perdieron la ventaja que habían logrado tras el segundo tiempo. Verdaderamente parecía ser más una molestia que un refuerzo. Para la próxima tendrá que cuidarse más cuando avance hacia el aro. Ayer le encontraron el truco.
LA LETALIDAD DE PAUL GEORGE
Cuando no marca, el equipo sufre. Cuando lo hace, el plantel se impone. Como en el primer partido de las finales de Conferencia, Paul George fue letal para la defensa del Heat. El escolta tuvo un registro de 37 puntos, cinco rebotes y seis robos de balón. Hay que destacar que 15 unidades llegaron a través de la vía de los tres puntos y si hablamos de la efectividad, Paul George marcó más del 50% de sus tiros de campo en 43 minutos que estuvo en cancha. Esperemos que siga así de letal para el sexto juego, los Pacers lo necesitan, sus fanáticos también y todos los amantes de la NBA desearían ver un partido como el que se presenció ayer en la noche. Lo de George fue para de MVP. No es una sorpresa verlo jugar de esa manera, eso sí, sería sorprendentemente verle mantener esa regularidad. Es probable que sea el más completo de la NBA. Marca, rebotea, asiste, roba balones y hasta saber anotar de dos y tres. Intratable.
LA MARCA DE LANCE Y LA PRESENCIA DE WEST
Stephenson fue el hombre que tuvo loco a LeBron y David West el apoyo que tuvo George. Mientras que Lance saboteaba todo intento de ataque del Heat, David marcó un total de 19 puntos, nueve rebotes y dos robos de balón. Para que los Pacers terminen en un gran nivel como el que lograron ayer, deben tener hasta tres jugadores que sepan conducir al equipo. Ayer fueron George, Stephenson y West. A veces, también, le falta algo de seriedad a Roy Hibbert y George Hill. Son grandes jugadores, pero sí fueran más constantes como otros compañeros, los Pacers podrían ser un equipo más seguro como lo hacen con sus rebotes.
LOS ERRORES NO FORZADOS
Debe ser el primer partido donde el Heat recién pudo superar a los Pacers en esta estadística. Mientras que el equipo de Vogel se equivocó en 12 oportunidades, Miami lo hizo 17 veces. Para colmo fue el ‘Big Three’ del Heat el que tuvo la mayoría de errores. Tres llegaron de parte de Lebron, seis fueron gracias a Dwayne Wade y dos para Chris Bosh. El campeón de la NBA tuvo un papel vergonzoso en el tercer periodo de estas finales y no habría que ser adivinos para saber que ahí perdieron el encuentro. Ahora Erik Spoelstra tendrá que variar algunos movimientos para asegurar este viernes la clasificación. Por algo son los favoritos y candidatos en el Este.