Cuando de remodelación se trata, la mayoría de las personas buscan darle a sus casas un aspecto distinto al de las demás. Entre más resaltante sea, mejor.
Una buena forma de lograr este efecto es mediante las paredes. La moda ya no es solo pintarlas sino darle distintas texturas para enriquecer el espacio y añadirle dramatismo.
Estas son algunas ideas:
Con molduras
Es una forma fácil de texturar las paredes. Puedes combinar diseños y colores. Se ven mucho mejor en espacio amplios como salas y comedores donde pueden lucirse.
Con paneles de tela
Puedes jugar con el tipo de tela que vas a elegir y los colores. Se ven muy bien en la habitación, especialmente en la pared donde se encuentra la cama pues añade calidez al espacio.
Con ladrillos expuestos
Son ideales para la cocina pues le dan una sensación de un espacio tradicional y vintage. Lo mejor es lograr un contraste con gabinetes blancos y algunos toques de color.
Con tablas de madera
La madera es una buena aliada para dar textura a un espacio. Al ser un material natural convierte el ambiente un lugar rústico. Al colocarlas sobre la pared y pintarlas, no te olvides de destacar las pequeñas imperfecciones que hay entre ellas para darle más vida.
Con reflejos
Hay algunos tipos de pintura que también puede ayudar a crear texturas. El acabado laqueado por ejemplo hace resaltar cualquier pared y añadirle luminosidad gracias al brillo.
Con papel tapiz texturizado
¿Hay algo más fácil que pegar la misma textura en la pared? Lo interesante es que no solo es algo que se ve bien sino que es agradable al tacto. Son una buena opción para el baño.
Acolchándola
Una pared acolchada es muy moderna y chic a la vez, además de aportar suavidad al espacio. Aunque es una técnica un poco más complicada, el acabado será espectacular.